El PP no renuncia a ninguna fuente de energía (lo que supone defender que se alargue la vida útil de las nucleares, así como la cogeneración, el hidrógeno verde, etc) y ahora propone descuentos de entre el 5% y el 40% en las facturas de luz y gas a consumidores domésticos y pymes que ahorren energía. Eso sí, defienden pasar de obligatoriedad a voluntariedad.

Estas son algunas de las medidas que incluye el plan de rescate energético presentado en rueda de prensa por el vicepresidente de Economía del PP, Juan Bravo, y que se remitiría después al Gobierno Sánchez. La medida estrella es el descuento para consumidores domésticos y pymes que consuman menos energía y que tendrá un coste medio para las arcas públicas de unos 2.900 millones de euros, que se financiarían con otras medidas (sobrerecaudación o Presupuestos). Si ahorran entre el 3% y el 7%, el descuento será del 5% en la factura de la luz y del 10% en el de gas; si ahorran entre el 7% y el 15%, la rebaja será del 10% en la factura eléctrica y del 20% en la gasística; y si ahorran más de un 15%, la bonificación sería del 20% y del 40%, respectivamente.

El PP plantea “simplificar la fiscalidad energética”: unificar todos los impuestos y reducirlos, así como retirar costes. Y votará no a a la toma de consideración de los nuevos impuestos a energéticas y banca, porque no reducirán las facturas de familias y empresas y solo tienen un afán recaudatorio

El PP también propone crear una AIReF energética “que respete las competencias de la CNMC, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y Red Eléctrica” para realizar análisis de gasto y de las medidas que se ponen en marcha. Entre las medidas, también está la de revisar la fórmula de fijación del precio de la energía, aunque Bravo no ha detallado cómo; reducir el precio de los derechos de emisión de CO2; potenciar los PPA (contratos de energía a largo plazo); intervenir el precio del gas “buscando consenso con los suministradores (EEUU, Noruega o Argelia, entre ellos)”; y al igual que la Comisión Europea, aboga por topar los beneficios extraordinarios de eléctricas que usan gas para su producción (o sea, renovables, nucleares e hidroeléctricas).

Entre las medidas del plan del PP también está la de “simplificar la fiscalidad energética”: unificar todos los impuestos y reducirlos, así como retirar costes (entre ellos, las primas a las renovables o los extrapeninsulares). Al conocerse el documento, se ha podido ver más detalle de algunas de las medidas tributarias: extender la rebaja del IVA mínimo del gas y la electricidad durante todo el invierno, rebajar los tipos del gasóleo para usos especiales que utilizan los agricultores y una rebaja temporal de los tipos impositivo del IIEE sobre Hidrocarburos hasta los mínimos contemplados en el Anexo I de la Directiva 2003/96/CE. Además, el PP habla de incentivar actuaciones de eficiencia energética y energías renovables, algo muy en la línea de lo que tanto le gusta a la vicepresidenta ecológica, Teresa Ribera. ¡Curioso! Eso sí, de entrada, el próximo martes votarán no a la toma de consideración de los nuevos impuestos a las energéticas y a la banca que pretende el Gobierno, porque creen que no reducirán las facturas de familias y empresas y que solo tienen un afán recaudatorio. 

Y por cierto, el plan se conoce el mismo día que Pedro Sánchez ante diputados y senadores socialistas ha propuesto muchos más debates al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en el Senado.