En esta semana hemos asistido a un nuevo ejemplo que vuelve a demostrar lo bien que ayuda el Gobierno a las empresas, en particular a las estratégicas. Y es que sólo ha repartido 1.106 millones de euros (concretamente, 1.105,83 millones), que sólo suponen el 11,0583% del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas de la SEPI que se creó en julio de 2020 con una dotación de 10.000 millones. Y ojo, no son entregas a fondo perdido, sino préstamos que los beneficiarios deben devolver.
El último rescate aprobado por el Consejo de Ministros ha sido el de la siderúrgica Rugui Steel: 25,03 millones, repartidos en un préstamo participativo de 13,525 millones y en otro ordinario de 11,5 millones. Se trata de la única siderúrgica de Castilla y León, que tiene también presencia en Navarra y País Vasco. Asimismo, tiene una importancia estratégica para la provincia de Soria, donde representa el 3,7% de su PIB, y en especial, para la localidad de Ólvega: allí concentra el 40% de su empleo (más de 300 puestos de trabajo directos y genera más de 1.000 indirectos).
El rescate de Rugui Steel es el sexto que aprueba el Gobierno y el tercero para una industria. Llega tras los que han recibido Air Europa, Ávoris, Duro Felguera, Plus Ultra y Tubos Reunidos
Rugui Steel remonta sus orígenes a una pequeña forja de 1920, que en la década de los 30 pasó a ser un taller dirigido por Román Ucín fabricando útiles de labranza. En 1977, se dejó esta tarea para instalar un tren de laminación de llanta y aumentó la activando, convirtiéndose en Laminados Ondarre diez años después y en 2001 se conformó lo que hoy se conoce como Rugui y a partir de 2007 hubo una gran transformación, optando por la internacionalización e incluyendo la fusión de acero, entre otros trabajos, y en 2016 integró en el grupo a la acería Nueva Incal. Actualmente, Rugui Steel exporta más del 75% de sus ventas y la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, estará feliz, porque sus productos serán neutros en carbono en 2023, “pudiendo convertirse en la primera siderúrgica del mundo en conseguirlo”, como destacó La Moncloa.
El rescate de Rugui Steel es el sexto que aprueba el Gobierno y el tercero para una industria. Llega tras los que han recibido Air Europa (475 millones), Ávoris (320 millones), Duro Felguera (120 millones), Plus Ultra (53 millones) y Tubos Reunidos (112,8 millones) -recuerden que con este, la ministra de Política Territorial y ministra portavoz, Isabel Rodríguez, presumió de “la sensibilidad que muestra el Gobierno con la industria” al aprobarlo... y eso que era el segundo para una industria-. Conviene destacar que tras la polémica que surgió con el rescate de la aerolínea Plus Ultra, el cual ha llegado a los tribunales y la jueza llegó a parar la entrega de 34 millones aunque después la desbloqueó, la SEPI -que depende del Ministerio de Hacienda, por tanto, de su titular, María Jesús Montero- va demasiado lenta a la hora de dar el visto bueno a los rescates solicitados por las empresas: de hecho, hasta el pasado se habían solicitado ayudas por unos 4.600 millones, entre ellas, las que han pedido las cadenas hoteleras Room Mate y Hesperia, la ingeniería Abengoa o el Grupo Villar Mir.