Cepsa ha publicado este viernes sus resultados de 2022, un año en el que nos menciona como titular de su presentación que ha mejorado sobremanera su ebitda y que duplicará sus inversiones hasta los 3.600 millones de euros (M€) a lo largo de los próximos tres años. En un primer vistazo, parece que la petrolera que es propiedad en un 61,5% del fondo soberano de Abu Dabi -Mubadala- y en un 38,5% del fondo de inversión estadounidense The Carlyle Group, ha tenido un buen año, gracias en gran parte al alto precio del crudo, como ya se ha visto en otras compañías de su sector (la brasileña Petrobras, la española Repsol, la portuguesa Galp, la anglo-neerlandesa Shell, la británica BP, la francesa TotalEnergies, la noruega Equinor o las estadounidenses Halliburton, Chevron y ExxonMobil). Veamos sus resultados con más detenimiento.

En 2022, el resultado neto de Cepsa, según la normativa internacional NIIF (IFRS, por sus siglas en inglés), ha alcanzado los 1.100M€, superando en 439M€ el obtenido en el ejercicio 2021, lo que significa un incremento porcentual en términos relativos del 66,41%. Una cifra muy buena y más aún si la comparamos con la obtenida en 2020, que fue negativa (-919M€) y con la positiva preCovid (820M€). Pero bueno, vamos a decirlo todo, porque no es oro todo lo que reluce. 

El resultado neto de 2022 ha venido afectado principalmente por un menor reconocimiento de deterioro de activos, que fue devenido por el impacto de la pandemia, y el aumento de los precios del crudo

Al igual que ocurrió en la comparativa de las cifras del grupo entre 2020 y 2021, el resultado neto de Cepsa de 2022 ha venido afectado principalmente por un menor reconocimiento de deterioro de activos, que fue devenido principalmente por el impacto de la pandemia en sus números. Es decir, el grupo reconoció en dicho período un gasto excepcional, a priori, no recurrente y no repetible al menos en igual importe en los períodos sucesivos. Claro que también es muy excepcional el precio más caro de la gasolina y el gasoil en nuestro país, en máximos históricos a día de hoy, o al menos eso dice nuestro “querido” Gobierno. La compañía que tiene como CEO al neerlandés Maarten Wetselaar desde el 1 de enero de 2022 ha referido que su resultado se ha visto afectado y mejorado principalmente por el aumento de los precios del crudo, los cuales han subido considerablemente respecto a 2021.

Al igual que hizo en el anterior ejercicio, Cepsa ha puesto especial énfasis en su gran capacidad de gestión de recursos, medida a través del indicador del resultado bruto de explotación (ebitda). En concreto, su ebitda ha seguido su senda particular ascendente desde 2020: entre 2021 y 2022 se ha disparado un 62%, hasta situarse en los 2.939M€, gracias a la mejora de las condiciones de mercado, los mayores precios del crudo, el incremento de los márgenes de refino y las iniciativas de optimización. El grupo divide su negocio en cuatro unidades principales: (i) energía, (ii) química, (iii) exploración y producción -denominada upstream en el argot del sector - y (iv) corporación. En las áreas de negocio más importantes (energía, y exploración y producción), Cepsa ha aumentado de manera considerable su ebitda, algo que no ha ocurrido de igual manera en los otras dos.

La capacidad de gestión de recursos, medida a través del ebitda, ha seguido su senda ascendente desde 2020: se ha disparado un 62% entre 2021 y 2022, a 2.939M€, por las mejores condiciones de mercado, los mayores precios del crudo, el incremento de los márgenes de refino y las iniciativas de optimización

En el negocio de exploración y producción, Cepsa ha duplicado su ebitda (+106,4%), hasta los 1.868M€, debido principalmente a un aumento del coste del crudo entre períodos del 43%, a una recuperación de la demanda y a las limitaciones de la oferta debido principalmente a la guerra en Ucrania. Respecto a la unidad de negocio de energía, el ebitda ha aumentado en un 45%, pasando de 571M€ a 828M€, y todo ello, pese a los descuentos en combustibles ofrecidos a sus clientes de 0,30 euros/litro, que han ascendido de 130M€ en 2022 y que se siguen manteniendo sin la bonificación del Gobierno y siendo algo menores hasta el próximo 31 de marzo, una pena porque el precio de gasolina y gasoil continúa estando muy caro.

Por su parte, el ebitda del negocio de química ha descendido en 2022, a diferencia de lo que ocurrió el año anterior, en un 17%, debido principalmente al descenso de ventas, pero no sorprende porque ha ido mostrando disminuciones en los distintos trimestres del año. Y la cifra de ebitda del área de corporación también ha descendido entre períodos, cifra poco relevante.

El incremento del flujo libre de caja a 1.149M€ viene explicado por el elevado aumento del ebitda (+62%), ya que a diferencia de lo que ocurría en la comparativa de 2021 respecto a 2020, en 2022 Cepsa ha aumentado sus inversiones en un 57%, a 743M€. Y ahora acelerará estas últimas a 3.600M€ en los próximos tres años

Finalmente, toca tratar de manera breve la capacidad de generar liquidez de la petrolera. Hemos echado en falta que no nos haya facilitado su estado de flujos de efectivo. Pese a no tener el grado de detalle sobre la liquidez que refleja el estado de flujos de efectivo, sí nos ha obsequiado con información sobre algunos indicadores de liquidez como son el flujo de caja libre y liquidez. En términos relativos, Cepsa ha aumentado su flujo libre de caja entre 2021 y 2022 y, de igual manera, lo ha hecho su liquidez -caja y activos líquidos más líneas de crédito comprometidas disponibles-.

El incremento de la cifra de flujo libre de caja hasta 1.149M€, respecto al de 1.065M€ del año anterior, viene explicado principalmente por el elevado aumento del ebitda (+62%) entre períodos, ya que a diferencia de lo que ocurría en la comparativa de 2021 respecto a 2020, en 2022 el grupo ha aumentado sus inversiones en un 57%, a 743M€. Esto obedece a su plan de expansión a través de la estrategia ‘Positive Motion’ a 2030, que incluye inversiones de 8.000M€ en siete años, y en la que se pisará el acelerador en los próximos tres años, con inversiones de 3.600M€, de los que el 50% será dedicado a negocios sostenibles, y que supone un 93% más frente a las inversiones realizadas entre 2020 y 2022. Además, esas milmillonarias inversiones no se financiarán con una salida a bolsa, que no se plantea de momento, y conviene recordar lo que el propio Wetselaar respondió a Hispanidad en un evento: “Históricamente Cepsa ha invertido unos 1.000 millones al año hasta la pandemia, cuando la cifra bajó a 400 millones, por lo que 8.000 millones en siete años no es mucho y se puede generar con el negocio existente. En un mundo normal con precios de la energía normales se puede generar ese cash flow (flujo de caja) y repartir dividendo”. 

Y en paralelo, ha lanzado este viernes su Plan de Sostenibilidad ‘Driving Positive Impact’ para impulsar la implementación del plan estratégico, y este último recuerden que tiene entre sus objetivos convertirse en líder en movilidad sostenible, hidrógeno verde (una ruina hoy porque aún no es rentable) y biocombustibles de segunda generación (entre ellos, para aviación) en España y Portugal esta década. Y recientemente, se ha conocido que Cepsa venderá una parte de su negocio de exploración y producción (en concreto la que tenía en Emiratos Árabes Unidos y que aportaba el 50% de dicha división) a la petrolera francesa TotalEnergies para maximizar la creación de valor de dicha división y avanzar en el giro verde para el que fue fichado Wetselaar. 

La contribución fiscal de Cepsa ha alcanzado el récord histórico de 6.654M€, de los que 4.721M€ se pagaron en España. Y este año, sumará el pago del impuestazo energético, que será de unos 325M€, cargo que no ha reflejado en los resultados presentados este viernes

Conclusión sobre los números: el resultado neto de Cepsa ha cerrado 2022 con una mejoría considerable y se ha incrementado la liquidez debido principalmente a un crecimiento muy abultado del ebitda. Eso sí, sin las ayudas de nuestro querido “Gobierno” y los menores descuentos que ofrece, el elevado precio de la gasolina en la actualidad está vaciando los bolsillos de los hogares. A ver si el grupo, que está ganando mucho como hemos visto, ayuda algo más a los ciudadanos (o al menos, sigue haciéndolo más allá del próximo 31 de marzo), porque ya sabemos que el Gobierno no lo hará.

Eso sí, no está de más referir la elevada contribución fiscal de Cepsa, que ha alcanzado el récord histórico de 6.654M€, de los que el 71% (4.721M€) fueron impuestos pagados en España. Además, este año, la petrolera afronta el pago de un impuesto extraordinario que grava a las empresas energéticas en función sus ingresos de 2022 y que para Cepsa ascenderá aproximadamente a 325M€, un cargo que no ha reflejado en los resultados presentados este viernes. Y recuerden que hace tres meses, Wetselaar afirmó que si se aprobaba la proposición de ley de este nuevo impuesto tal y como estaba “diseñada no tendremos otro remedio que impugnarla en los tribunales españoles y europeos”.