Teresa Ribera ha sorprendido este lunes montando en bicicleta..., eléctrica, por supuesto, y ¡escoltada por dos coches de combustión! por las calles de Valladolid, y todo para ir a la cumbre de ministros europeos de Medio Ambiente. Y todo esto en campaña electoral para el 23-J, siendo la número dos de la lista por Madrid, tras su jefe, Pedro Sánchez,... y con mucho menos sentido del ridículo.

Al hilo de la escena que está corriendo por las redes sociales como la pólvora, podría plantearse ir al Tour de Francia que se está celebrando o a la próxima Vuelta a España. Claro que el vídeo es más bien una pose ecológica y demagoga porque Ribera ha viajado de Madrid a Valladolid ¡en el Falcon! Un avión que contamina mucho... y que pagamos todos los españoles. Y a pesar de lo mucho que desde el PSOE se criticó el ‘Verano Azul’ del PP, ahora va Ribera y se pone a montar en bici...

Pero en su primera intervención en la citada cumbre, la vicepresidenta ecológica no ha perdido la oportunidad de advertir que “no podemos fallar. Nuestras economías tienen que reequilibrarse” y de los récords de altas temperaturas que estamos viviendo. Por su parte, el comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, el lituano Virginijus Sinkevičius, se ha referido a los suelos europeos, destacando que “el 60% no están en buen estado”. Claro que la Ley de Restauración de la Naturaleza no parece que lo vaya a solucionar, pero sí que pondrá en peligro la actividad de agricultores y pescadores, algo que parece no importante ante tanta religión climática.

Según fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en la cumbre de ministros de Medio Ambiente y Energía de la UE que se celebra desde este lunes y hasta el miércoles en la capital castellanoleonesa, se hablará de la próxima COP28 que se celebrará en Dubai (Emiratos Árabes Unidos), para hacer balance respecto al Acuerdo de París y abordar las expectativas y el liderazgo verde de la UE. Y para ello, se contará con la presencia del presidente de la próxima Cumbre del Clima, el sultán Ahmed Al Jaber, que a su vez es CEO de la mayor petrolera de Abu Dabi. En el entretanto, Emiratos Árabes Unidos, junto con Arabia Saudí y otros 11 países que conforman la OPEP y sus aliados (el grupo conocido como OPEP+ que incluye a Rusia, México y Kazajistán, entre otros países) reducen la producción mundial de crudo y destrozan la economía de Occidente. También hay que tener en cuenta que Emiratos no es como el rebelde Catar y apoya a la Arabia Saudí de Mohamed bin Salmán, que ha logrado tener un ejército fuerte gracias a EEUU y que no tiene ninguna urgencia económica, por lo que atrás quedan los tiempos en que Henry Kissinger llamaba a Arabia para que aumentara o redujera producción de crudo para que bajara o subiera el precio. Ahora, tanto Arabia Saudí como Rusia tienen la sartén por el mango y al extender el recorte de producción de crudo a todo 2024... el precio ha subido (el barril de Brent ronda los 78 dólares). Y además, ahora Occidente está enfrentado tanto con el islam suní de Arabia Saudí como con el islam chií de Irán.