En pleno mes de agosto, continúo sin saber por qué Pep Oliu no se defiende con más entusiasmo del ataque del BBVA de Carlos Torres. Conozco al presidente del Sabadell desde hace 30 años y éste no parece mi Pep, un personaje que cuando algo le interesa, pelea a muerte por ello.

En concreto, ¿por qué no utiliza el caso Villarejo? Así, se quitaría de encima al BBVA en un par de minutos y comprometería al BCE, pieza clave en este proceso? Sin embargo, el Sabadell parece haber renunciado a emplear esa arma.

Recuerden: el juez Manuel García-Castellón se jubila con un auto de transformación según el cual el BBVA pasa como persona jurídica imputada al juicio oral. El Sabadell, ni tan siquiera ha reclamado a la CNMV esta cuestión. Por contra, parece esperar a la lentísima CNMC, cuyo dictamen es tan pertinente como poco ejecutivo. Al menos, los juristas difieren sobre el alcance de la obligatoriedad de su seguimiento. Parece una actitud demasiado pasiva para un personaje como el cátedro Pep que, encima, está en vía de jubilación, ha dado un pelotazo con la salida a bolsa de Puig y tiene un sucesor natural en la persona de César González-Bueno, que reside en Barcelona desde su nombramiento... aunque sea Madrid y no precisamente de izquierdas.

Si Oliu no tiene sucesor yo le propongo uno: César González-Bueno, su ceo, residente en Barcelona

Uno esperaba que el presidente del Sabadell ya hubiese acudido al Banco Central Europeo (BCE), para recordarle que un banco imputado en un caso penal no puede mantener su estructura: ni al presidente, ni al consejero delegado y, si me fuerzan, sería preciso renovar el proceso al Consejo de Administración, en pleno.

Otro punto que me parece muy importante es que el despacho de abogados Uría y Menéndez trabaje para el Sabadell, al igual que trabaja para el otro bando, el BBVA. Uría y Menéndez sólo es fiel al Banco Santander. ¿Después del papel que jugaron en la venta, por un euro, del Popular al Santander? ¿En serio? ¿Acaso no recuerdan que los expertos de Uría convencieron a los ingenuos consejeros del Banco Popular de que no tendrían ninguna responsabilidad penal si aceptaban la liquidación de la entidad y su regalo al Santander? Bueno, a la vista está que no estuvieron muy atinados. Y ahora acuden a este bufete para que les asesore, ¿en estos momentos? Insisto: este no es mi Pep.

Es cierto que, ahora mismo, Oliu controla el Consejo del Sabadell y que el CEO, César González-Bueno, controla el equipo... y defiende que quien tiene que ganar con esta fusión es el BBVA, no el Sabadell

En cualquier caso, no utilizar el caso Villarejo en el pulso contra el BBVA resulta cuando menos curioso. Es cierto que ahora mismo, Oliu controla el Consejo del Sabadell y que el CEO, Cesar González-Bueno, controla el equipo... y defiende que quien tiene que ganar con esta fusión es el BBVA, no el Sabadell, que todavía no ha llegado a la cumbre de un proceso de renovación que nadie duda en calificar de exitoso. Es el BBVA el que necesita comerse al Sabadell, no el Sabadell el que necesita, no lo necesita para nada, ser comido por el BBVA.

Y en estas condiciones, ¿Pep Oliu calla? ¡Es raro!