El plan de adelgazamiento afectará a 44.000 empleados de los 147.000 que están repartidos por las distintas filiales del grupo, en América, Europa, Asia y África. En Corea del Sur, donde trabajan alrededor de 120.000 personas, no hará ningún ajuste -realizó uno en 2015 que afectó a unos 10.000 empleados- y mucho menos en sus plantas de producción. En España, la plantilla ronda los 400 trabajadores.
El ajuste se llevará a cabo durante esta segunda mitad del año y se produce después de la primera huelga -huelga histórica- convocada por los trabajadores de la empresa en Corea del Sur, el pasado mes de junio. Entre sus principales reivindicaciones, ampliar las vacaciones un día más.
Lo cierto es que los resultados de la multinacional fueron malos en 2023, con un desplome del 73,6% del beneficio y mucha incertidumbre por la caída de la demanda en todo el mundo. Y las dudas continúan a pesar del repunte del beneficio del segundo trimestre -multiplicó por quince el del año anterior-, y son las que han llevado finalmente a la dirección ajustar la plantilla.
Las acciones de Samsung acumulan una caída de más del 9% en los últimos doce meses y de más del 19% desde enero.