El laboratorio francés Sanofi tiene la intención de deshacerse próximamente de su división de medicamentos sin receta con el fin de lograr ingresos que le permitan culminar la salida de nuevos medicamentos. Tiene en este momento unos diez en la fase de ensayos clínicos, la etapa más costosa, y otros quince en etapas anteriores de investigación.
Para ello, la multinacional farmacéutica tiene pensadas dos posibilidades: o una salida a bolsa o una venta.
Cabe recordar que esta división de Sanofi ingresó 5.130 millones de euros el año pasado, lo que supuso el 12% del total de su facturación. Por lo que este movimiento empresarial podría ser uno de los más elevados del sector farmacéutico.
En esta operación podrían ayudarle Goldman Sachs, Morgan Stanley, BNP Paribas y Bank of America.
Otras grandes empresas del sector han realizado movimientos similares. Es el caso de GlaxoSmithKline y Johnson & Johnson.
La primera, la británica, segregó su división de medicamentos sin receta en 2022 en una nueva empresa bajo el nombre de Haleon, cuando facturaba unos 10.000 millones de euros.
Por su parte, Johnson & Johnson creó Kenvue, una compañía independiente que hasta cotiza en Wall Street.