Ha pasado un mes desde que Línea Directa se emancipó de Bankinter y comenzó a cotizar en el mercado continuo.Todo un éxito: las acciones de la aseguradora cerraron este viernes a 1,61 euros por título, frente a los 1,31 euros de su debut, el 29 de abril. La compañía se ha revalorizado un 23% en un mes.
Pero, ¿fue una buena idea? Porque la evolución de Bankinter ha sido justo la contraria: sus acciones han pasado de los 5,95 euros el 28 de abril a los 4,68 euros del viernes (ver el gráfico de Infobolsa). Una caída del 21,4% que costará remontar y que confirma lo que adelantó Hispanidad cuando se anunció la salida a bolsa de Línea Directa: el accionista, en realidad, no ganaba nada porque le estaban dando algo que ya tenía.
Sea como fuere, lo que nos enseña este caso concreto es la importancia que tiene actualmente en los bancos el negocio de seguros. Lo saben muy bien en VidaCaixa, que ganó 887,9 millones de euros en 2020 (+11,7%), casi dos tercios del beneficio del grupo Caixabank, que alcanzó los 1.381 millones.
A Bankinter le va a costar sobreponerse, pero lo peor no es eso. Lo peor es que una vez vendida Línea Directa ya no puede volver a venderla. Ni recuperarla.