Talgo ha ganado 20,7 millones de euros hasta septiembre, superando los 11 millones del primer semestre y dejando las pérdidas de 7,6 millones de hace un año. Sin embargo, pese a la notable mejora en el resultado y al récord de facturación, aún no recupera el nivel preCovid: las ganancias aún son un 16,4% inferiores a las de hace dos años.
El fabricante de trenes que preside Carlos de Palacio Oriol y dirige Gonzalo Urquijo sólo ha subido un 0,7% en bolsa en la mayor parte de la sesión, aunque ha cerrado con un alza del 3,04%, y prevé un nuevo programa de remuneración al accionista en el primer semestre de 2022. El Ebitda ajustado ha sido superior al esperado por los analistas del Banco Sabadell, situándose en 49,8 millones (+120%), con un margen del 11,7%, y el Ebit se ha cuadruplicado, hasta 37,2 millones. Unas mejoras en el desempeño operativo que se explican por la mayor actividad industrial en el negocio de fabricación y por la recuperación de los servicios de mantenimiento en todos los mercados.
En el mercado se vuelve a rumorear que Talgo pueda ser objeto de opa si el fondo Trilantic no da marcha atrás en su salida, aunque la compañía se ve con fuerza para seguir en solitario: su cartera es “de alta calidad y bien diversificada” y le garantiza una fuerte actividad industrial hasta 2024
Talgo ha logrado un récord de facturación, alcanzando los 427 millones, gracias a la ejecución de la cartera de pedidos para el proyecto ‘España Muy Alta Velocidad’ de Renfe y a la mayor actividad de mantenimiento. La cartera de pedidos ha ascendido a 3.013 millones, a los que se sumarían los 249 millones de contratos adjudicados y pendientes de firma. Además, estrenará en marzo el primer tren de hidrógeno de España, según informa Crónica Vasca.
En el mercado se vuelve a rumorear que Talgo pueda ser objeto de opa si el fondo Trilantic no da marcha atrás en su salida, aunque la compañía se ve con fuerza para seguir en solitario: su cartera es “de alta calidad y bien diversificada” y le garantiza una fuerte actividad industrial hasta 2024. El mercado sitúa a CAF como el principal pretendiente, aunque podría haber otros (por ejemplo, Stadler).