El timo del tope ibérico al precio del gas se extenderá a la Unión Europea. Este es el principal acuerdo de la última reunión del Consejo Europeo, pero aún no se trata de una decisión definitiva. Y por cierto, no será gracias a España, por mucho que Pedro Sánchez intente anotarse el tanto, sino a la cesión de Alemania.
Una medida acordada en la madrugada del viernes 3 que se encuentra entre las conclusiones relacionadas con la energía y la economía. Horas después, en rueda de prensa, Sánchez señalaba que dicha medida era “satisfactoria” y destacaba que “en muchas de las medidas propuestas por la UE, España se reconoce”. Y en varias ocasiones, repetía que los líderes de los 27 “hemos mandatado a los ministros de Energía” para que tomen decisiones al respecto en su reunión del próximo día 25.
Al ser preguntado por las reticiencias que Alemania tenía ante el tope ibérico, Sánchez ha dicho una verdad, sorprendentemente: “Mantiene su papel de liderazgo”. Y es que el país que dirige su “amigo Olaf” Scholz había echado un pulso al resto de la UE, pues solo aceptaría el timo del tope ibérico si la UE aceptaba que dieran un regalazo de 200.000 millones de euros a sus empresas y ciudadanos para aliviar el impacto del aumento de los precios del gas y de la electricidad… sin verlo como ayudas de Estado. Así, Scholz ha ganado el pulso: horas después de su cesión en Bruselas, el Bundestag aprobaba el paquete de medidas por 20.000 millones, también conocido como “escudo defensivo”.
En paralelo, Sánchez ha agradecido a Emmanuel Macron y a Antonio Costa el acuerdo para desarrollar un corredor de energía verde, denominado BarMar porque se extenderá entre Barcelona y Marsella. Al final, el amigo francés se ha salido con la suya porque no habrá MidCat. Sánchez ha destacado que este corredor submarino “ofrece seguridad, certeza y capacidad adicional a la UE en el momento en que más lo necesita”. Pero ojo, tardará de “cuatro a cinco años” en construirse, como ha señalado la vicepresidenta ecológica, Teresa Ribera, porque es una infraestructura que tiene “técnicamente su complejidad” al ser un proyecto submarino, frente al MidCat que era terrestre e iba por los Pirineos. Hay que tener en cuenta que a este último sólo le faltaban por construir 226 kilómetros, mientras que el BarMar tendrá unos 360 kilómetros e irá por mar… ¿y se imaginan si tiene una fuga el día de mañana? Causaría mayor daño ecológico que el MidCat. Además, primero llevaría temporalmente gas y más adelante, hidrógeno verde. Y aún quedan muchas incógnitas sobre el proyecto, como la financiación: la próxima cita entre España, Portugal y Francia tendrá lugar el 8 y el 9 de diciembre en Alicante... y Sánchez ha invitado a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.