VidaCaixa cerró los nueve primeros meses del año con un beneficio de 945,8 millones de euros, un 10,3% superior al del mismo periodo de 2023, según las cuentas difundidas este viernes por la compañía.
Lo más destacado, por inusual, fue la reducción del 3,7% de los ingresos por primas y aportaciones, que se situaron en 9.808 millones de euros, de los que 7.434 millones correspondieron a seguros de ahorro, precisamente, una de las claves del ejercicio. Y esto porque los seguros de ahorro individual cayeron un 8,3%, hasta los 6.832 millones.
Por su parte, las aportaciones a los planes de pensiones individuales y colectivos aumentaron un 12,6%, hasta los 1.225 millones de euros. La buena evolución de los mercados impulsó el crecimiento de los activos gestionados, que alcanzaron los 129.942 millones, un 12% más.
Las prestaciones en España y Portugal, y esto también es inusual, fueron casi las mismas que las del año anterior: 4.120 millones, frente a los 4.141 millones, un 0,5% menos.
Sea como fuere, la aseguradora, cien por cien propiedad de Caixabank, aumentó un 5,7% el número de clientes, hasta los 6,8 millones. Sobre la DANA, la compañía se comprometió a agilizar el cobro de los siniestros a los clientes.