Exclusivas de la prensa de hoy
La Junta Electoral Central ha abierto un expediente sancionador al presidente en funciones, Pedro Sánchez, por haber utilizado La Moncloa con fines "electoralistas". O sea, un jetas de mucho cuidado que encima, ayer, aseguró que el PSOE llevará en su programa la defensa del federalismo y la plurinacionalidad.
Estas son las exclusivas del día, empezando por las económicas:
Banco Santander está dispuesto a cobrar a los particulares por los depósitos si los tipos de interés bajan más. El consejero delegado del grupo matizó que, sin recortes, la situación se mantendrá como está ahora. (El Economista)
La Confederación Empresarial de Madrid (CEIM) y la catalana Foment del Treball unen fuerzas para contrarrestar la pérdida de protagonismo para ambas por la nueva configuración de la cúpula directiva de la CEOE. El presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, manifestó su voluntad de construir las máximas complicidades económicas entre Madrid y Cataluña, que “aportan un 40 por ciento del PIB”. (El Economista)
La CNMV ha exigido a Dia que incluya un "aviso importante" justo en el arranque del folleto de su ampliación de 605 millones. (Cinco Días)
“La liberalización va a elevar la competitividad del ferrocarril y rebajará el precio del billete del AVE en un 40%”, dijo ayer el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, en unas jornadas de infraestructuras organizadas por EXPANSIÓN. El Gobierno tiene depositadas grandes expectativas en la ruptura del monopolio de Renfe en el AVE, que arranca hoy con la presentación de ofertas a Adif. “Las inversiones de los operadores rondarán 1.500 millones de euros”, detalló el ministro de Fomento. (Expansión)
La Comisión Nacional de Competencia (CNMC) ha aplazado la aprobación de las circulares que fijarán la retribución a la distribución del gas natural. El Ministerio de Transición Ecológica y la mayoría del pleno de la CNMC respaldan volver a un sistema basado en la actividad, en lugar del modelo de activos propuesto en la consulta pública y que el Departamento de Teresa Ribera ya calificó de retroactivo. Este cambio supondría suavizar el ajuste adelantado para el sector. Según fuentes del Gobierno, las negociaciones han provocado un profundo malestar en Transición Ecológica, ya que los técnicos de su departamento y los de la CNMC no han logrado alcanzar un acuerdo y estos últimos defienden ahora, con el apoyo del presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, un modelo mixto. (El Economista)
El ministerio centrará su actuación en el control de la figura del autónomo “para evitar abusos” de empresas como Glovo o Deliveroo. (El Economista)
A punto de comenzar oficialmente la campaña electoral, los partidos políticos se prestan a librar una guerra encarnizada por los votos. Diez días restan para que se abran las urnas y los dos bloques, izquierda y derecha, afrontan el sprint final en empate técnico. Ésta es la principal conclusión que se desprende del tracking de Sigma Dos para EL MUNDO. El bloque de la izquierdas se anotaría, a día de hoy, el 44,9% de los votos y 159 diputados, en tanto que el de derechas conseguiría el 42,9% de las papeletas y 154 escaños. Entre ambos, apenas un tiro de piedra. El PSOE 120 escaños, el PP 94, Vox 44, Podemos 36, y Cs 16. (El Mundo)
Los cien escaños empiezan a pesar dentro del PP. La administración de las expectativas puede acabar convirtiendo un buen resultado en una derrota, y eso temen que pueda ocurrir con el optimismo oficial del partido sobre los resultados del 10-N. La advertencia es clara: «es un error marcar unas previsiones demasiado altas porque cualquier cifra por debajo de las mismas restará valor al resultado». (La Razón)
El líder de Vox afronta sus segundas elecciones generales a lomos de un discurso de mano dura contra el independentismo, con el que su partido creció y con el que aspira a mejorar sus resultados. "En realidad es el cumplimiento de la ley. Pero sabemos que no basta con la mano dura. Es necesaria porque hay que restaurar el orden constitucional y la convivencia, pero no es suficiente para resolver un problema que tiene hondas raíces. Pero nunca se resolverá si no se arrebata al separatismo el control de la educación y los medios". (El Mundo)
Apuesta por un Gobierno «centrado, moderado y reformista» de PP y Cs, pero ofrece al PSOE un gran acuerdo nacional que evite «desencajar toda España para encajar Cataluña» Albert Rivera reconoció ayer sin medias tintas que Ciudadanos «se la juega» en los próximos 10 días. El fantasma de un descalabro que propicie un cuestionamiento de su liderazgo es algo que no visitaba desde los ya remotos orígenes catalanes del partido. Entre 2006 y 2012 Rivera estuvo políticamente muerto varias veces. Nunca desde entonces las previsiones sobre la evolución del partido fueron tan sombrías como para que su continuidad al frente de Ciudadanos sea uno de los temas de los que podría hablarse tras el 10 de noviembre. (ABC)
En una entrevista a LA RAZÓN, Bescansa argumenta que su partido se presenta “contra la irresponsabilidad de los que pudieron formar gobierno y no lo hicieron” y cree que Podemos “cambió de rumbo” para “ocupar el mismo lugar político de IU”. La cofundadora de la formación morada, que abandonó el partido hace un año, cree que “el hecho de que Iglesias y Errejón no hayan seguido remando en la misma dirección ha llevado al desgaste de Podemos”. Sobre la crisis independentista asegura que debe crearse un” espacio de diálogo entre las fuerzas soberanistas y las que no lo son” y defiende que “los soberanistas no deben estar fuera del sistema, hay que integrarlos”. Centra los ejes programáticos de su partido en la derogación de la reforma laboral y la ley mordaza, el eje verde, medioambiental, transición energética y ecológica como clave y la construcción de una nueva institucionalidad de marcado carácter feminista. (La Razón)
Recuperar la desconcentración de los jueces catalanes, supone un nuevo giro de guión del propio Sánchez, que hace menos de un mes –en el entorno del segundo aniversario del referéndum ilegal del 1-O– en una entrevista a «Nius» sorprendía al afirmar que no era partidario de una mayor descentralización en Cataluña, sino que quería mantener el actual «statu quo» en relación con el Estatut catalán. Esta declaración suponía un cambio en el discurso que venía manteniendo hasta entonces sobre la conveniencia de mejorar y profundizar en el autogobierno catalán y que ahora recupera en el programa electoral. (La Razón)