La Audiencia de Madrid le dejó ayer al juez Juan Carlos Peinado seguir investigando a Begoña Gómez por un presunto delito de trafico de influencias, pero excluyendo de la investigación todo lo relativo a Globalia y Air Europa, aerolínea que fue rescatada por el Gobierno de su marido, Pedro Sánchez, mientras ella mantenía una relación comercial con el CEO, Javier Hidalgo. Lo que es bastante lamentable. Solo si apareciesen nuevos indicios probatorios, el tituar del juezgado nº 41 de Madrid podría reabrir la parte relavtiva a Globalia.
Y la otra noticia del día ha sido la reforma legal que el Gobierno --por medio de Sumar y presionado por EH Bildu-- coló en una ley, que permite reducir la pena a 44 etarras (podrían descontar la condena que ya han cumplido en Francia). Ni PP ni Vox se enteraron de la reforma. Y ahora ya no se va a poder parar y entrará en vigor, para escarnio de las víctimas de ETA.
Estas son las exclusivas del día: