El nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó este jueves 28 de enero una orden ejecutiva con la que revocó la ‘política de Ciudad de México’, una medida firmada por la anterior administración de Donald Trump que impedía el financiamiento, con fondos federales, de organizaciones abortistas fuera del país, recoge Aciprensa.
Como publicó Hispanidad, en EEUU se conoce como 'política de Ciudad de México' aquella que impide el uso de dinero público para financiar el aborto en el exterior del país o a las ONG que “hagan o activamente promuevan” el aborto como una forma de planificación familiar. La política de Ciudad de México se instauró durante el Gobierno de Ronald Reagan (1981-1989).
Y Biden acabó con ‘política de Ciudad de México’ justo a la vez que se ha conocido el resultado de una nueva encuesta, publicada el miércoles 27 de enero, según la cual la mayoría de los estadounidenses se opone al uso de sus impuestos para financiar abortos en el país o en el extranjero, recoge Aciprensa.
La encuesta fue realizada por la Orden de los Caballeros de Colón junto con el apoyo de Marist Poll, la encuesta nacional de opinión pública operada por el Marist Institute for Public Opinion del Marist College, de New York.
El Caballero Supremo de los Caballeros de Colón, Carl Anderson, indicó en un comunicado que “en medio de las duras divisiones políticas en nuestro país, claras mayorías bipartidistas apoyan las restricciones al aborto y no quieren que el dinero de sus impuestos pague el aborto en el extranjero”.
Claras mayorías bipartidistas apoyan las restricciones al aborto y no quieren que el dinero de sus impuestos pague el aborto en el extranjero
“Nuestras encuestas han demostrado consistentemente durante la última década que las políticas que promueven el aborto pagado por los contribuyentes son polémicas y están fuera de sintonía con la opinión pública estadounidense”, agregó.
Según la encuesta, la gran mayoría (77%) señaló que “se oponen” o “se oponen firmemente” al uso de los impuestos para pagar los procedimientos de aborto en todo el mundo. Solo el 19% de los encuestados apoyó la financiación pública de abortos en el extranjero.
Además, reveló que la mayoría de los estadounidenses están a favor de importantes restricciones al aborto. Más de las tres cuartas partes de los encuestados (76%) indicaron que quieren que el aborto se prohíba o se limite a los primeros tres meses de embarazo, como máximo.
Anderson pidió el miércoles “moderación” sobre las políticas a favor del aborto, con el fin de reflejar con mayor precisión los deseos de los estadounidenses que quieren restricciones al aborto. “El pueblo estadounidense muestra consenso y moderación sobre este tema, y esperamos que nuestros funcionarios electos y políticos presten atención a este llamado a la unidad cuando hay demasiado que nos divide en nuestra política actual”, concluyó.