- De poco le servirá, porque esa división tiene acumulada una deuda de 3.144 millones de euros.
- El hecho de sacar el 51% tiene su importancia: será el auditor el que decida si puede o no seguir desconsolidando esa deuda.
- Como adelantara Hispanidad, Deloitte ha advertido a Florentino: si no vende las renovables durante este ejercicio tendrá que consolidar su deuda.
- La clave, sin embargo, está en que las renovables de ACS valen menos que su deuda.
La contabilidad es una ciencia exacta: dice exactamente lo que uno quiere que diga. Florentino Pérez (en la imagen) lo sabe muy bien. Ha mantenido disponibles para la venta los activos renovables de ACS durante cuatro años, lo que le ha permitido desconsolidar la deuda asociada a esos activos.
Hablamos de 3.144 millones de euros, una cifra más que preocupante. Aunque sea totalmente legal no contabilizarla mientras los activos estén a la venta, la deuda permanece, y las deudas, antes o después, hay que pagarlas.
En todo caso, como ya adelantara Hispanidad, Deloitte ha advertido a Florentino: si no vende las renovables durante este ejercicio, tendrá que consolidar la deuda asociada a esos activos. Es decir, la deuda de ACS pasaría de 6.875 millones de euros a 10.019 millones.
El problema es que nadie quiere comprar las renovables. Por eso, Florentino ha tenido que pasar al plan B: sacar a bolsa la filial de renovables, Saeta Yield, y según el comunicado remitido este jueves a la CNMV, colocar el 51% entre inversores institucionales. Saeta Yield posee 16 parques eólicos y tres termosolares, todos en España. Para hacer la oferta más atractiva, promete repartir el 90% del beneficio en dividendos.
El hecho de que sea el 51% tiene su importancia, porque permitirá desconsolidar la deuda de las renovables, siempre y cuando el auditor lo permita… y suele permitirlo. El argumento es: como no tiene la mayoría, usted no controla esa empresa y, por lo tanto, no consolida su deuda.
El auditor tiene que elegir entre ese argumento o el contrario: aunque usted haya perdido la mayoría, aún tiene el 49% y aún controla la sociedad, por lo que sí debe consolidar esa deuda. Pero, estén tranquilos: el auditor suele permitir la primera versión. La clave, sin embargo, está en que las renovables de ACS valen menos que su deuda. Para que se hagan una idea, hasta el octubre pasado, Saeta Yield ingresó 181,5 millones de euros y registró un Ebitda de 129 millones.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com