- Tímida reacción en bolsa ( 0,6 frente a la caída del Ibex) en el arranque de adhesiones al acuerdo de reestructuración.
- Todo en Abengoa sucede apurando los plazos: lo previsto para finales de este mes será el 25 de octubre.
- Necesita el 75% de apoyos del pasivo financiero del Grupo en marzo, tras la prórroga para salir del concurso.
- El problema, no resuelto, es la asfixia financiera, por las condiciones de financiación de los bonistas.
Sigue el culebrón
Abengoa, agotador en los plazos para llegar al juez que tendrá en la mano que salga del
concurso de acreedores (finales de octubre, el día 28). Y mientras tanto, la actividad de la tecnológica sigue, sin que sepamos todavía los resultados correspondientes al segundo trimestre, pero sí bastante de las
condiciones financieras, muy duras, de la
restructuración del grupo, que preside de momento
Antonio Fornieles (
en la imagen).
Un detalle, pero importante: lo que estaba previsto iniciar a finales de agosto, arranca este lunes: en
periodo de adhesiones al
plan de rescate, cuyo límite ha fijado para el 25 de octubre, siempre que no se pidan más días de
prórroga.
En otras palabras, convencer al
75% de los acreedores (mínimo) en los que estaba el pasivo financiero del grupo en marzo. La reacción en
bolsa a ese inicio ha sido positiva. El valor sube un 0,6% cuando la tendencia en el Ibex es de caídas (superiores al 1%).
El suspense ahora está en las adhesiones, tras la comunicación de
Abengoa a la CNMV el viernes de madrugada, un mes y medio después de que la empresa apremiara "encarecidamente" a los
acreedores para que respaldaran el acuerdo firmado a mediados de agosto por los fondos y los bancos.
El viernes pasado, dicho sea también, se practicó la misma
nocturnidad con la que dio a conocer el
acuerdo in extremis, el 11 de agosto, o la
explicación de ese acuerdo, una semana después, mientras no se despejaba, como ahora tampoco, el gran problema de la
asfixia financiera. De hecho, el interés del
último crédito -para ir tirando- se acerca al 20% (desde el 12,5% más Libor) para pagar otro crédito con
Talos.
Recuerden, como ya les contamos que el
coste real de la financiación es del 24%. Como mínimo un 20% (47 meses), que puede aumentar al 24% (12 meses), cuando los tipos de interés oficiales del BCE están en el 0%. Y ese lastre de la deuda, junto a la
jibarización por el plan de ventas, compromete los ingresos necesarios de la tecnológica.
Rafael Esparza