• Y vuelve a aflorar el nombre de Javier Monzón como presidente de Abengoa.
  • Por ahora, lo único que ha conseguido el resto de la banca es que HSBC deje de hablar de iniciar el concurso de acreedores.
  • Y así, la banca no ha respondido aún a la nueva petición de fondos, que KPMG cifró en 250 millones de euros.
  • Recuerden que los bancos ya otorgaron 160 millones a Abengoa para reforzar el circulante.
  • Mientras, la ampliación de capital sigue su curso legal pero pendiente de la banca.
La historia de la recapitalización de Abengoa empieza a parecer una novela río. Y por cierto, se está contando bastante mal. Veamos: en el momento presente está en marcha una ampliación de capital, asegurada y todo, pero la banca acreedora, verdadera deuda de la empresa, impedirá que se lleve a cabo si antes no se arregla un pequeño problemilla. Una de las entidades clave, el HSBC británico -aunque no es el único- brama porque lo que considera una tomadura de pelo por parte de Javier Benjumea y su tropa de leales, entre ellos el nuevo Ceo, Santiago Seage y el presidente José Domínguez Abascal, ambos directivos ligados a Benjumea ('berenjenas', como le califican los accionistas cabreados) las constantes peticiones de fondos. Ahora bien, que la ampliación se lleve a cabo depende de que la banca acepte poner otros 250 millones de euros de circulante. Y ahí es donde HSBC, primer banco acreedor junto al Santander, se ha plantado. Vuelve a amenazar con el concurso de acreedores y, por lo menos, exige que si hay que poner sobre la mesa otros 250 millones de euros más los 160 ya otorgados, debe ser a cambio de modificar el equipo directivo. Y por cierto, al HSBC, el banco internacional más tramposo  de todos, no le conmueven los riesgos del Gobierno español por salvar la ingeniería andaluza. Es ahí donde aflora el nombre de Javier Monzón (en la imagen), presidente saliente de Indra, a quien el Santander ya propuso como consejero pero al que ahora podría proponer presidente ejecutivo o como Ceo con plenos derechos. Y es que el HSBC exige cambios en el equipo Benjumea, del que ya no se fía. Eso sí, en lo del concurso de acreedores podría estar jugando de farol. No le interesa a nadie. Eulogio López eulogio@hispanidad.com