- Así lo describe el Departamento de Energía de EEUU (DOE) para autorizar la venta del 25% que la empresa andaluza en su antigua filial Atlántica.
- Una operación que resulta clave en el saneamiento financiero de Abengoa.
- Esos 120 millones forman parte de la deuda contraída para la construcción de plantas solares en EEUU y otras garantías.
- La venta ya puede cerrarse. Ventaja: aligera la carga financiera de Atlantica sin consumir recursos de Abengoa.
- Sin embargo, el mercado exige más a Gonzalo Urquijo: exige la vuelta a la normalidad.
Abengoa logra por fin cerrar el
acuerdo con Atlantica Yield a cambio de
120 millones de dólares (unos 102 millones de euros). Se trata de una de las condiciones que ha establecido el Departamento de Energía de EEUU (
DOE) para autorizar la
venta del 25% de la filial a los canadienses de
Algonquin Power.
Así consta en la información enviada al regulador bursátil norteamericano (SEC) por parte de Atlantica Yield referente al tercer trimestre del año. Unas cuentas donde también se incluye un
generosísimo dividendo de 0,857 euros/acción (un 78% superior al de hace un año).
La operación resulta clave en el saneamiento financiero de Abengoa. Esos 120 millones que aportará la compañía que preside
Gonzalo Urquijo forman parte de la deuda contraída para la
construcción de plantas solares en EEUU (en Mojave, California, y en Solana, Arizona). El DOE fue el avalista de la financiación lograda en su día por Abengoa para levantar dichas plantas, que después fueron transferidas a Atlantica Yield junto con otros activos de la compañía sevillana. Por ello,
el DOE ha tenido especial interés en que parte de los ingresos que va a conseguir Abengoa por la venta del 25% de Atlantica (607 millones de dólares, es decir, unos 515 millones de euros) se dediquen a levantar esos avales concedidos
para financiar las citadas plantas.
Eso sí, la autorización del DOE, la cual se materializa en forma de levantamiento de compromisos adjuntos a la financiación de las dos plantas solares, incluye
otras obligaciones de pago para Abengoa. En concreto, 25 millones para asegurar las operaciones de
mantenimiento de las plantas mientras estén en garantía y también otras obligaciones hasta completar un total de 120 millones de dólares en pagos a
Atlantica.
Fuentes financieras señalan lo positiva que es la autorización del DOE para ambas partes. Y es que
aligera la carga financiera de Atlantica Yield sin consumir recursos de Abengoa: destina parte de los ingresos proporcionados por Algonquin, gracias a la venta del 25%. Además, mejora las expectativas de la filial, así como la
posibilidad de obtener un mejor por el 15,5% que aún posee Abengoa.
Sin embargo, el mercado exige más a
Gonzalo Urquijo: concretamente, la vuelta a la normalidad. Ahora toca que lleguen
ingresos, no ventas… a pesar de que entre las desinversiones previstas también está el
Tercer Tren de México.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com