• Tras los mensajes de apoyo a los fondos de inversión late la amenaza de una OPA hostil.
  • Los italianos reiteran que el socio de referencia, Criteria-Godia, sólo controla el 22%, mientras los fondos más del 60%.
  • El Gobierno sigue manteniendo su postura: no tajante a la operación sobre la española.
  • Pero sigue sin aclarar el modelo de autopistas, que también late de fondo.
Las cartas están sobre la mesa: al Gobierno Rajoy no le gusta un pelo la oferta lanzada por Atlantia sobre la española Abertis -lo ha dejado claro el ministro De la Serna- y, en paralelo, los Benetton recurren a todas las vías para evitar el gesto indeseado: la OPA hostil. Cambian así las tornas, en el tono del discurso, de oferta amigable a voy a por ti como sea. La triquiñuela está en los inversores institucionales (fondos de inversión), a la espera de que se pronuncie el socio de referencia, Criteria y las hermanas Godia, que se han dado de plazo hasta mediados de mes. Atención y suspense. La maniobra utilizada ahora por los italianos es hablar con los fondos de inversión, que controlan más del 60% por capital, explicándoles las bondades de la oferta y el precio justo que se ofrece, 16,5 euros por acción. Esa participación conjunta (aunque repartida entre varios, como Capital Group, Blackrock o Lazard) supera al 22,25% de Criteria-Godia (tras el pacto parasocial que les une), incluso teniendo en cuenta el 8,2% de autocartera. Otra cosa es la postura que sigue manteniendo el Gobierno Rajoy -no tajante-, aunque resistiéndose a entrar en el face to face con el Ejecutivo italiano. Ese frente une a todos los ministros económicos (Guindos, Montoro, De la Serna y Nadal, que además tiene lo suyo con Enel, dueño de Endesa). Y eso, en paralelo también, a otro problema de fondo, que ha sacado de quicio a Abertis: la ausencia de un modelo español de autopistas, razón por la que ha tomado posiciones en Francia o Italia. El problema está en los próximos vencimientos de las concesiones de autopistas que explota Abertis. Rafael Esparza