- Así lo han confirmado fuentes de la compañía de bajo coste, las cuales subrayan que, aunque el avión tenía 24 años de antigüedad, había pasado todas las revisiones (la última fue ayer lunes).
- También remarcan que "el piloto era una persona muy experimentada" porque tenía más de diez años de experiencia con el A320 y contaba con más de 6.000 horas de vuelo.
- 150 personas (142 pasajeros, dos bebés y seis miembros de la tripulación) es el triste balance de víctimas del primer accidente relevante de Germanwings.
- El avión, que cubría la ruta Barcelona-Düsseldorf, descendió durante ocho minutos antes de estrellarse en los Alpes franceses, según Germanwings.
- La zona del siniestro es inaccesible por carretera, por lo que sólo se puede llegar allí a pie o en helicóptero.
Este martes, tristemente hay que hablar de un accidente aéreo que se ha cobrado la vida de 150 personas. Un Airbus A320 de Germanwings, aerolínea 'low cost' filial de Lufthansa, que viajaba entre Barcelona y Düsseldorf se ha estrellado en los Alpes franceses, cerca de la localidad de Barcelonnette.
Se trataba del avión más antiguo de la compañía de bajo coste germana, pues tenía 24 años de antigüedad, pero fuentes de la aerolínea han subrayado que era "seguro" porque había pasado todas las revisiones. Precisamente, la última se le realizó ayer por técnicos de Lufthansa y en 2013 se le hizo una revisión completa. Así lo ha señalado, en rueda de prensa, el gerente de Germanwings, Thomas Winkelmann, que también ha querido remarcar que "el piloto era una persona muy experimentada", pues tenía más de diez años de experiencia con el A320 y contaba con más de 6.000 horas de vuelo.
150 personas (142 pasajeros, dos bebés y seis miembros de la tripulación) es el triste balance de víctimas del primer accidente relevante de Germanwings. El presidente francés, François Hollande, ha señalado que "las condiciones del accidente hacen pensar que no hay ningún superviviente". Un helicóptero de rescate ha podido aterrizar en la zona del siniestro y ha constatado, desgraciadamente, que no hay supervivientes, según ha confirmado el primer ministro francés, Manuel Valls. Entre las víctimas, 45 personas tenían apellido español y 67, alemán. Esta última cifra podría variar y en ella se contabilizan 16 escolares que, acompañados de dos profesores, habían participado en un programa de intercambio con el Instituto Giola de Llinars del Vallés (Barcelona).
El avión Airbus A320, que cubría la ruta Barcelona-Düsseldorf, descendió durante ocho minutos antes de estrellarse en los Alpes franceses, según Germanwings. Aún se desconoce por qué se ha producido este accidente y será necesario iniciar una investigación amplia al respecto, así como revisar las cajas negras. Parece ser que el piloto no fue el que hizo la llamada de emergencia, sino que quien alertó fue el control aéreo al ver que el avión volaba a una altura "anómala". Por su parte, Valls ha comentado que "ninguna hipótesis puede ser descartada", aunque la de un atentado terrorista no es prioritaria. Mientras, el diputado francés Christophe Castaner ha confirmado que ya se ha localiado una de las cajas negras y que "el avión está totalmente destruído".
La zona del siniestro es escarpada e inaccesible por carretera, por lo que sólo se puede llegar allí a pie o en helicóptero. En las cercanías de la localidad francesa de Barcelonnette se está poniendo en marcha todo el operativo de rescate (como se puede ver en la imagen). El dispositivo cuenta con 300 bomberos, 300 militares, diez helicópteros y aviones militares, según ha informado el ministro del Interior francés, Bernard Cazeneuve. Precisamente, hacia esta zona ya viaja la ministra de Fomento española, Ana Pastor.
Esta tragedia aérea ha provocado una oleada de condolencias, sobre todo por parte de los tres gobiernos afectados (el español, el francés y el alemán), así como cancelaciones de agenda, entre ellas, la de los los Reyes de España, que han suspendido la visita oficial a Francia poco después de que comenzara, y también la del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que viajará el miércoles a la zona del accidente.
En el aeropuerto barcelonés de El Prat, AENA y la Generalitat de Cataluña han puesto en marcha un gabinete de crisis, así como un servicio de atención médica y psicológica para atender a los familiares de las víctimas que se han ido acercando a este lugar. Hasta Barcelona viaja el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, mientras, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, dirige el gabinete de crisis puesto en marcha en Moncloa.
Cristina Martín