ACS no ha tenido un buen día en bolsa este jueves 23, pues ha sido el valor que más ha caído del Ibex (-5,34%). ¿El motivo? Ha anunciado, en un hecho relevante, que perderá 400 millones de euros, debido a que su filial australiana, Cimic, se ha lucido en Oriente Medio.

En concreto, esta última tenía una participada en dicha zona -la constructora dubaití BIC Contracting (BICC)- y ha decidido no continuar dándole apoyo financiero. Esperemos que esto no afecte al otro negocio que preside Florentino Pérez, el Real Madrid: la aerolínea Emirates, cuya sede está en Dubái, es patrocinador principal del equipo de fútbol, al igual que lo es Adidas.

A ¡Oh capitán, mi capitán! le gusta crear empresas ‘verdes’ y luego venderlas... especulando, por supuesto

No obstante, ACS ha señalado que el impacto negativo de 400 millones “será compensado fundamentalmente por las mejoras en los resultados operativos y por las plusvalías obtenidas en 2019”. Así, el beneficio neto del grupo será superior a los 950 millones y el dividendo no se verá afectado: se mantendrá un pay out del 65%.

En lo que respecta a las citadas plusvalías de ACS en sus resultados de 2019, conviene destacar que 250 millones proceden de la venta de los activos fotovoltaicos que Zero-E (su filial de renovables) tiene en España. Como se vio en los resultados de los nueve primeros meses, ¡Oh capitán, mi capitán! necesita vender, porque tiene un problema de tesorería tras comprar Abertis. 

Así, se puede decir que el mercado secundario de renovables se llama… Florentino Pérez: como sucede con las acciones en bolsa, el mercado primario es el productivo y el secundario el especulativo, y a ¡Oh capitán, mi capitán! le gusta crear empresas ‘verdes’ y enseguida venderlas. Así se ha podido ver en el pasado con Saeta Yield y ahora con Zero-E. Solo que en este último caso la venderá por paquetes: la petrolera lusa Galp se hará con el primero a cambio de 2.200 millones (el valor de capital -750 millones- más la deuda -1.450 millones-), generando unas plusvalías para ACS de 330 millones, superiores en 80 millones a las previstas en un principio (los 250 millones que contabilizará en sus cuentas de 2019).