La pandemia del coronavirus ha provocado la peor crisis para la historia de la aviación, colocando a las aerolíneas en una delicada situación financiera, al borde de la quiebra, y necesitando ayuda de los gobiernos. Uno de los últimos ejemplos es el de Air France-KLM, que ha aplaudido en bolsa (+2,5%) la noticia de que recibirá 3.400 millones de euros de Países Bajos, que se sumarán a los 7.000 millones que le dará Francia.
Estos dos países tienen sendas participaciones del 14% en el grupo aéreo franco-holandés y cada uno ha aprobado ayudas para sus respectivas ramas nacionales. Francia anunció que daría 7.000 millones (3.400 millones en ayudas directas que tienen el visto bueno de la Comisión Europea y 4.000 millones en préstamos) a Air France, que recortará entre 8.000 y 10.000 empleos, y ahora Países Bajos ha comunicado que dará 3.400 millones (2.400 millones en préstamos bancarios con garantías y 1.000 millones en un préstamo directo) a KLM.
Países Bajos pone condiciones a cambio del dinero: suspensión de dividendos, reducción del 15% en los gastos, y merma de los bonos de directivos y los salarios de los altos cargos
Eso sí, Países Bajos ha puesto condiciones a cambio del dinero: suspensión de dividendos, reducción del 15% en los gastos, merma de los bonos de directivos y de los salarios de los altos cargos, y una contribución activa a la sostenibilidad. Eso sí, el ministro de Finanzas de Países Bajos, Wopke Hoekstra, también ha abierto la puerta a dar más dinero a KLM si esta primera ayuda “no es suficiente”, porque el “impacto de la crisis en la aviación es peor de lo que se creía al principio”. Además, el CEO del grupo Air France-KLM, Benjamin Smith, reducirá un 25% su salario fijo y ha renunciado a la remuneración variable, aunque por ahora se mantiene intacta la prima de 2 millones que cobraría en 2022 si llega a determinadas condiciones de rendimiento.
La ayuda de Países Bajos se conoce un día después de que los accionistas de Lufthansa aprobaran el rescate de 9.000 millones del Gobierno alemán y de que España anunciara que prepara su plan de ayudas a las aerolíneas. Iberia, perteneciente al holding IAG, permanece atenta.