Airbus ha elevado los despidos anunciados en su división de Defensa y Espacio en 302, hasta los 2.664. Esto en España supone que se pase de 630 empleados afectados a 722 en un área que supone el 71% de su plantilla… y todo ello un día después de que Pedro Sánchez mostrara su apoyo al gigante aeronáutico europeo en Twitter.
El pasado martes, el presidente del Gobierno tuiteó: “Acabo de conversar con el CEO de Airbus, Guillaume Faury. Le he transmitido el apoyo de España a la empresa, como socio fundador. El sector aeroespacial atraviesa tiempos difíciles pero Airbus es una gran compañía, con un futuro prometedor en nuestro país”. Así, sembró polémica en la red social y temores en la plantilla de Airbus. Poco más de 24 horas después, se ha confirmado lo peor: el gigante aeronáutico europeo ha anunciado que aumentaba los despidos en Defensa y Espacio, porque el coronavirus ha agravado la situación de problemas financieros que arrastraba en dicho negocio y prevé que haya reducciones o restricciones de los presupuestos de los países para defensa. ¡Olé, Sánchez!
Acabo de conversar con el CEO de AIRBUS, @GuillaumeFaury. Le he transmitido el apoyo de España a la empresa, como socio fundador. El sector aeroespacial atraviesa tiempos difíciles pero AIRBUS es una gran compañía, con un futuro prometedor en nuestro país.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) June 23, 2020
Se repite la historia de Nissan: recuerden que el pasado enero, en el Foro de Davos, el presidente del Gobierno tuiteó que el mantenimiento del empleo en la planta de Barcelona estaba garantizado, pero cuatro meses después, el fabricante automovilístico japonés anunció el cierre de dicha factoría y de otros centros de la Ciudad Condal provocando 3.000 despidos. Ahora, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha salvado a 110 empleados del despido, pues se mantendrá el centro de recambios de El Prat de Llobregat.
Al hilo Airbus, conviene poner todas las cartas sobre la mesa. Sánchez presume de “socio fundador”, pero hay que recordarle que sólo tiene un 4,2% a través de la SEPI, lejos de las participaciones de los otros dos socios (Francia y Alemania): ambas del 10,9%. Asimismo, están las desavenencias de los últimos meses, con chantaje de Airbus incluido, después de que el Gobierno eligiera a Indra como coordinador nacional del FCAS (futuro avión de combate europeo). Y no se puede olvidar la mentira que usaron, sobre todo, los alemanes sobre el A400M.
Hace unos días, el presidente de Airbus España, Alberto Gutiérrez, advirtió que Alemania y Francia han sido más rápidos en proteger el empleo
A todo esto se suma que el coronavirus ha golpeado duramente al sector aeronáutico, parando el tráfico aéreo y colocando a varias aerolíneas al borde de la quiebra, y la recuperación tardará años. De hecho, muchas aerolíneas ya están renegociando pedidos de aviones con los fabricantes y Airbus ya ha hecho reducciones temporales de empleo y sueldo en su división civil, y la de Defensa y Espacio ha vendido su inmueble de la zona Madrid-Barajas a la firma inmobiliaria Hines por 29,2 millones. Hace unos días, en la entrevista con ABC, el presidente de Airbus España, Alberto Gutiérrez, advirtió que “Alemania y Francia han sido más rápidos en proteger el empleo”, insistió en que era necesario “tomar decisiones ya” y pidió que el Gobierno apostara por la industria.