- Las religiosas llevaron a cabo la restauración de un órgano del convento que habitan y que ha sido sufragado íntegramente por una fundación especializada.
- La Junta de Andalucía ha arremetido contra las religiosas alegando que el convento está considerado Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1983, y que bajo dicha calificación se encuentran también todos los elementos que lo integran, incluido el órgano.
- En tan sólo 72 horas, más de 50.000 personas han apoyado la petición ciudadana promovida por MasLibres.org para impedir que las religiosas paguen una sanción impuesta por la Junta de Andalucía que asciende a 170.000 euros.
Más de 50.000 ciudadanos han exigido a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz y al consejero de Cultura de la región, Miguel Ángel Vázquez que retiren la "injusta y desmesurada" multa impuesta a las trece monjas de clausura que llevaron a cabo la restauración de un
órgano del convento que habitan y que ha sido sufragada íntegramente por una fundación especializada. La campaña ha sido puesta en marcha por
MasLibres.org y
puede verse aquí.
Y es que ante el mal estado del órgano y el silencio de la Junta de Andalucía, las monjas del convento de Santa Inés en Sevilla decidieron aceptar la oferta del restaurador
Abraham Martínez, cuyo trabajo ha sido financiado por la Fundación Alquimia Musicae, especializada en este tipo de proyectos.
La portavoz de MasLibres.org,
Inmaculada Fernández, asegura que la intención de las religiosas era ayudar. "Las monjas no han atentado contra el Patrimonio Histórico al restaurar el órgano de la leyenda de Bécquer, sino que, por el contrario, han velado por mantenerlo vivo", destaca.
La Junta de Andalucía ha arremetido contra las religiosas alegando que el convento está considerado
Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1983, y que bajo dicha calificación se encuentran también todos los elementos que lo integran, incluido el órgano. Por ello,
la institución andaluza exige a las monjas una multa desorbitada: 170.000 euros.
Además, después de multarlas, la Junta ha decidido aprobar la restauración del órgano. Sin embargo y, a pesar de que ya está reparado,
continúan manteniendo la sanción de 170.000 euros impuesta a las religiosas que viven tan solo de la venta de sus dulces conventuales y de donaciones".
"Es una gran injusticia y una persecución manifiesta que la Junta de Andalucía no cese en su empeño de arruinar a las monjas de clausura que sólo han demostrado que saben cuidar de manera exquisita del
patrimonio artístico que está en su convento, en contraposición con la dejadez de la Junta de Andalucía respecto al órgano", concluye Fernández.
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com