- Constituyeron la columna vertebral de la política de Cristina Fernández.
- El plan del nuevo presidente es quitar los subsidios para la clase media y alta y dejarlos para los más pobres.
- Entre las que quitaría poco a poco figuran las subvenciones que mantienen baratas las tarifas de electricidad y gas y los billetes de trenes y autobuses en Buenos Aires.
- En la actualidad, el 93% de los usuarios de Buenos Aires recibe la subvención a la electricidad, ricos y pobres.
Una de las claves del largo periodo de Gobierno de la dinastía 'kirchnerista' en la
Argentina fue la política de
subvenciones y ayudas para servicios públicos y de primera necesidad: agua, gas, electricidad… Tal política ha generado un déficit y un endeudamiento enormes para el país.
El nuevo presidente de Argentina,
Mauricio Macri (en la imagen), dijo en entrevistas que irá reduciendo poco a poco las subvenciones que mantienen baratas las tarifas de electricidad y gas y los billetes de trenes y autobuses en Buenos Aires: "Las corregiré gradualmente. Mi tarea es cuidar a la gente. Voy a cuidar los subsidios para aquellos que los necesitan. Me comprometí a un sistema de tarifas justo", asegura.
El plan de Macri, según personas de su entorno, es quitar los subsidios para la clase media y alta y dejarlos para los más pobres. En la actualidad, el 93% de los usuarios de
Buenos Aires recibe la subvención a la electricidad, ricos y pobres. La luz en la capital cuesta cinco veces menos que en Córdoba, la segunda ciudad más poblada de Argentina, un país en el que el 21% es pobre, explicó
El País.
Macri explicó las razones del ajuste paulatino, en lugar del drástico que esperan algunos inversores como condición para apostar por la tercera economía hispanoamericana: "Necesito tener un gradualismo intentando acompañar el proceso y no trayendo una recesión. Lo que queremos evitar es que otra vez caigamos. Acá el desafío es que arranque Argentina y lo antes posible volvamos a crecer".
Andrés Velázquez
andres@hispanidad.com