Miles de personas marcharon el 25 de marzo en Buenos Aires y en otras ciudades de Argentina para manifestarse contra el proyecto que prevé legalizar el aborto, coincidiendo con la celebración del Día del Niño por Nacer.
En Buenos Aires, la iniciativa contó con el apoyo de la Iglesia católica y la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA) y en su acto central contó con varios disertantes, entre otros, médicos de distintas especialidades, informó Clarín.
Con diferentes conceptos coincidieron en rechazar los proyectos que proponen la despenalización del aborto, no solo entendieron que va contra la Constitución, sino que además enfatizaron en derecho de quien está por nacer.
La convocatoria, que según la Policía contó con 10 mil asistentes y según la organización, con 50 mil, reclamó que la vida sea entendida como un derecho que debe ser respetado desde la concepción y contó con réplicas en unas 150 localidades del interior del país, informó a su vez La Nación.
La iniciativa para despenalizar el aborto lleva la firma de 71 diputados de distinto signo político, después de que el presidente del país, el conservador Mauricio Macri, contrario al aborto, habilitase su debate en el Congreso, añade France 24.
En Argentina ya existe el aborto por riesgo de vida o salud de la madre y por violación de una mujer considerada "idiota o demente".
Según Notivida, el nuevo proyecto despenaliza el aborto libre hasta la semana 14; y más allá de ese plazo si hay riesgo para la vida de la madre, si existe la "posible ocurrencia" de un peligro para la salud (física, psíquica o social) de la mujer (el mismo coladero que en España); si el embarazo es producto de una violación o hay malformaciones fetales graves, incompatibles con la vida extrauterina. En ningún caso se requerirá orden judicial para llevar a cabo el aborto.
La "posible ocurrencia" de un peligro para la salud de la mujer podría ser: "me parece que el embarazo me va a deprimir o "creo que no me va a alcanzar la plata para mantener al bebé" o "presumo que no estoy preparada para tener un hijo con síndrome de down", añade Notivida.