La economía española crecerá un 6,2% del PIB este año, según las últimas previsiones macro del Banco de España, publicadas este lunes, frente al 6% estimado en marzo. La mejora -solo son dos décimas- se debe a la aceleración del proceso de vacunación y al crecimiento de la economía global. Por cierto, en Cibeles ven “factible” la vacunación del 70% de la población a finales de agosto, tal y como prevé el Gobierno. Lástima que el mérito sea de las Comunidades Autónomas.
El Banco de España también prevé que 2022 será mejor: el PIB crecerá un 5,8%, frente al 5,3% estimado en marzo, debido fundamentalmente al efecto arrastre de 2021 y al impacto de los fondos europeos. La cosa cambia en 2023, con un crecimiento que se reduce al 1,8%, frente al 1,7% estimado en marzo. Son niveles normales de crecimiento. De hecho, el Banco de España prevé que volveremos a niveles de actividad pre-covid a finales de 2022.
Lo malo es la deuda pública, disparada con el pretexto de la pandemia. Si en marzo la previsión era cerrar 2021 con una deuda del 117,9% del PIB, ahora es del 120,1%. Una previsión muy optimista si tenemos en cuenta que el primer trimestre de este año cerró con una deuda del 125,3% del PIB. Esto no va a ver quién lo pague. ¿Acaso alguien se imagina al gobierno social-comunista reducir la deuda mientras el BCE siga comprando nuevas emisiones y siga manteniendo los tipos al cero por ciento? Y así, al menos, durante el próximo lustro.
La tasa de paro mejorará en 202: no será del 17% estimada en marzo, sino del 15,6% y bajará hasta el 14,7% en 2022 y al 13,7% en 2023. Recuperaremos el nivel de desempleo pre-covid a finales de 2022, según el supervisor.
Como ven, las previsiones de este lunes no difieren mucho de las de marzo. Y la inflación, que en mayo escaló hasta el 2,7%, no preocupa: “Hay razones para pensar que obedece a factores coyunturales”, que es un efecto “temporal”, ha explicado Óscar Arce, director general de Economía y Estadística del Banco de España, durante un encuentro telemático con la prensa.
Y sobre la principal actividad económica de nuestro país, el organismo prevé que este verano recuperemos el 50% del turismo de 2019. Ojalá. De momento, los touroperadores británicos han aplazado hasta el 4 de julio los viajes a Baleares.