- En el país de la demagogia pasan estas cosas: que se nos pone cara de tontos.
- ¿Y qué pasa con los 1.700 millones 'pagados' al tramo minorista? ¡Qué onerosa resulta la paz social en España¡
- Entre nosotros, los loados inspectores Víctor Sánchez y Antonio Busquets han quedado como la chota de Pumarín.
- Y si no hay falseamiento contable, ¿qué delito cometió el malvado Rato y su equipo?
- Por último, ¿qué estarán pensando los 300.000 accionistas del Popular que perdieron, de la noche a la mañana, los 1.300 millones de euros que el banco valía en bolsa?
Ojo al dato: Fiscalía y FROB, como acusación particular, exoneran a Bankia por su OPV (salida a bolsa) como institución y
piden la absolución de Bankia y del auditor Deloitte, dado que no creen que se haya producido falseamiento contable.
Es decir, después del escándalo montado por la instrucción del juez
Fernando Andreu, fuese y no hubo nada. Ahora le toca a la Sala, que puede estudiar el caso acudiendo a alguna acusación particular o enfatizando la decisión del juez instructor, quien sí ve indicios de delito, pero si la Fiscalía y el FROB (Gobierno) no ven delito, mal vamos.
¿Y cómo se ha vendido la noticia? Pues asegurando que se piden años de cárcel a
Rodrigo Rato (
en la imagen) y a su equipo de colaboradores. Por falsedad y un montón de cosas más. Ahora bien,
si no hubo falseamiento contable, y se trata de una salida a bolsa, si Bankia valía lo que el equipo directivo y sus asesores, y su auditor, decían que valían,
¿de qué se acusa a Rodrigo Rato y su gente? ¿De estafa cuando no hubo falsedad?
Y luego vamos con los expertos. Porque tras esta decisión de la Fiscalía, los que quedan como la chota de Pumarín son, además del propio juez Andreu, los dos inspectores rebeldes del Banco de España,
Víctor Sánchez Noguera y
Antonio Busquets. Y los que quedan bien, a los que ratifica el fiscal, son los peritos de la propia Bankia, el también inspector en excedencia del Banco de España,
Rubén Manso y el jurídico
Leandro Cañibano.
Ojo, y el Banco de España que siempre defendió que las cuentas de Bankia representaban adecuadamente lo que valía la entidad.
Más necedades.
¿Y qué pasa ahora con toda la pasta que se ha devuelto, sobre todo el tramo minorista que se elevó a 1.700 millones de euros? No digo que se haya devuelto todo, porque muchos renunciaron pero, en cualquier caso, el Gobierno compró la paz social a muy alto precio… y
con el dinero de todos los españoles.
Y también queda un pelín mal el
Tribunal Supremo, que se cargó la prejudicialidad penal y los tribunales civiles empezaron a exigir que se devolviera el dinero a unos inversores a los que, según la Fiscalía, nadie había engañado.
¿Podría ser que la Sala hiciera más caso de una acusación particular que de la Fiscalía y el FROB? Sí, pero sonaría rarote.
En cualquier caso, todos los bocazas que se cansaron de hablar del gran engaño de la OPV de Bankia, ¿No deberían estarse calladitos?
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com