Está crecido Pedro Sánchez, obsesionado con la expresión “poder real”, independientemente de mayorías parlamentarias. Ha aprendido a andar por el alambre… y todo esto acaba en que en Moncloa blasonan de que si FG ha abandonado antes de lo previsto el BBVA ha sido gracias a sus presiones.
La verdad es que, hasta el momento, todos pensábamos que el mérito era del Banco Central Europeo (BCE) pero desde Moncloa aluden a que el rescate del fondo de pensiones de FG podría toparse con problemas fiscales, de repatriación. ¿Quiere esto decir que Sánchez utiliza la Agencia Tributaria para amenazar a ‘sus enemigos’? ¡Por supuesto que no!
Y, mientras, las cintas de Villarejo continúan revoloteando por los centros de poder empresarial
Y el asunto no acaba ahí: Sánchez continúa empeñado en jubilar, del todo, a César Alierta, a quien no perdona. El saludo entre el presidente del Gobierno y el expresidente de Telefónica, durante la fiesta del diario económico Expansión, da que pensar.
Sánchez no olvida ni perdona que, en su día, Alierta, vía CEC, apoyara a su archienemiga (perdón archiadversaria), Susana Díaz.
Y, mientras, las cintas de José Manuel Villarejo continúan revoloteando por los centros de poder empresarial. Y ahora se dice que muchas de esas cintas ya no están en venta… y que podrían ser utilizadas. O al menos poseídas, por el propio Gobierno.