• Trindent y Multiópticas, dos de los patrocinadores de la gala, se desmarcan, no así Citröen.
  • Recuerda a otras ofensas como la de Rita Maestre, el padrenuestro patrocinado por Ada Colau o las formas consagradas robadas por Abel Azcona.
  • El Episcopado ha protestado oficialmente y el obispo canario ha convocado una misa de desagravio.
Dos de los patrocinadores de la Gala Drag Queen de Canarias, en concreto la cooperativa Multiópticas y el fabricante de chicles Trident, se han desmarcado ya de la ofensa a los cristianos que protagonizó el primer premiado en esos actos del carnaval, no así otro de los patrocinadores, el fabricante de automóvil Citroën. Las tres empresas figuran en la campaña de firmas promovida por Enraizados, a través de la plataforma Change.org, en la que se piden responsabilidades por la falta de respecto a los cristianos en ese carnaval. Se les pide, más en con concreto, "que se desmarquen de esta provocación ya que, si no es así, las personas que se han sentido ofendidas por este espectáculo dejarán de comprar sus productos". Como ya les hemos contado, el primer premiado, llamado Drag Sethlas, se burló de la forma más obscena de la Virgen María y de la crucifixión de Cristo. La blasfemia ha generado, además, una protesta oficial de la Conferencia Episcopal y del obispo de Canarias, Francisco Cases, que ha convocado a una misa de desagravio mañana viernes en la catedral de Las Palmas. La campaña de Enraizados, mientras, sigue en Change.org, con una diferencia importante. Ayer miércoles sumaba 20.000 firmas de apoyo y este jueves ya están prácticamente en el doble: se acercan a 40.000. En esa misma petición se recuerda otras ofensas como la de Rita Maestre asaltando semidesnuda una capilla, el padrenuestro blasfemo patrocinado por Ada Colau o el robo de formas consagradas de Abel Azcona en Pamplona. RTVE, después de iniciada esa campaña, decidió retirar de su página web la polémica gala Drag, lo que ha provocado otro debate, de naturaleza política -aunque cristófoba en su esencia- por parte de algunos diputados canarios. La reacción en Twitter de la compañía de chicles Trident es breve, como obliga esa red social: "Respeta todas las opiniones, creencias y tendencias sin que esto implique que la marca las promueva o se identifique con ellas". Multiópticas, por su parte, ha pedido "disculpas", aclarando que "lamenta polémica" y que su intención "no era ofender a nadie". Queda Citröen, que se puede encontrar con la desagradable reacción de que dejen de comprar sus coches. Rafael Esparza