Mientras el presidente del Gobierno, don Pedro Sánchez Pérez-Castejón, otorgaba graciosamente la apertura a los “lugares de culto” –en la Fase I, (no se vayan a creer y con rígidas normas que reducen hasta un 30% el aforo) el BOE publicaba la prohibición expresa de cultos en la vía pública.

La verdad es que sacar a un espacio abierto las celebraciónes eucarísticas -o el rosario de una fiesta patronal-, era uno de los recursos de los sacerdotes en tiempos de persecución, porque de persecución a la Eucaristía es de lo que estamos hablando, consiste en salir a celebrar a los espacios libres, donde hay menos riesgo de contagio, ¿no?

Para entendernos, que al BOE le importa un pimiento el contagio: lo que importa es fastidiar a los católicos en su punto neurálgico: la Eucaristía.

Antaño, los obispos daban ejemplo a los sacerdotes, ahora parece ocurrir ciertamente al revés

Los obispos tendrán años para arrepentirse de no haberle plantado cara a los socio-podemitas en defensa de sus fieles. 

Reproducimos el vídeo de un sacerdote que nos cuenta precisamente esto, porque refleja lo que está ocurriendo hoy en la Iglesia española. Antaño, los obispos daban ejemplo a los sacerdotes, ahora parece ocurrir ciertamente al revés. Escuchen al cura: anda bastante cabreado… y con razón.