Bruselas ha dado un aviso a España, mediante una carta firmada por el vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, y el comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, a raíz del plan presupuestario presentado la semana pasada. Y es que aunque entienden que el Gobierno Sánchez está “en funciones”, subrayan que el gasto del plan presupuestario cuadruplica el recomendado y podría desviarse de los objetivos de deuda y déficit.
En concreto, refieren que “el borrador presupuestario proyecta un crecimiento nominal del gasto primario del 3,8%, que excede el 0,9% recomendado”. Es decir, este indicador, que es el resultado del gasto público total (pensiones, Sanidad, Educación, funcionarios, etc.) menos el pago de intereses y/o amortizaciones de deuda, sería cuatro veces superior al recomendado.
Montero dice que el borrador incluía el mayor gasto de revalorizar pensiones y subir el sueldo de los funcionarios, dos medidas electoralistas
Pero no sólo eso, Bruselas ha apuntado a que está bien la mejora del 0,1% del PIB en el objetivo de déficit, pero sigue por debajo del ajuste estructural pedido (0,65%). Por tanto, España deberá hacer ajustes por un valor de 6.500 millones de euros.
Claro que la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, lo ha tomado con calma, señalando que el borrador no incluía medidas adicionales de ingresos al tratarse de una prórroga presupuestaria, aunque sí una partida mayor de gasto derivada de la revalorización de las pensiones y del aumento de sueldos de los funcionarios. Dos medidas de las que los socialistas esperan sacar rédito electoral el próximo 10-N. “No es una regañina, es la constatación de que efectivamente este país necesita un presupuesto y para eso es necesario un gobierno a pleno rendimiento que pueda trabajar”, ha subrayado. Por su parte, la titular de Economía en funciones, Nadia Calviño, ha destacado que la Comisión Europea conoce bien el esfuerzo que está haciendo España.