Parece que Bruselas quiere parar los pies a Amazon, pues le acusa de usar datos de sus vendedores (en concreto, de pequeñas empresas y comerciantes que venden a través de su plataforma) para competir con ellos lanzando productos similares. Tras la investigación, podría presentar cargos contra Amazon, según The Wall Street Journal y Bloomberg, en los próximos días y es posible que también una multa, que podría llegar hasta el 10% de su facturación anual.
La vicepresidenta de la Comisión Europea y comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, no quiere que el gigante estadounidense del comercio electrónico siga abusando de su posición de dominio. Y como saben, esta política danesa no tiene miedo a los gigantes de Internet, pues también se ha enfrentado a Google por diversas prácticas monopolísticas.
El tema de que Amazon usa datos de vendedores no sólo se investiga en Bruselas, también en EEUU: así fagocita el comercio electrónico que monopoliza
El tema de usar datos de vendedores no sólo se investiga en Bruselas, también en el Departamento de Justicia de EEUU y el regulador de comercio de dicho país (FTC), incluyendo a otras grandes tecnológicas. Amazon lleva tiempo haciendo esta práctica, de la que ya hablamos en Hispanidad, insistiendo en que fagocita el comercio electrónico que monopoliza al competir contra sus propios clientes. Algo que no hacen otras compañías de su sector, como la china Alibaba, la japonesa Rakuten o la estadounidense eBay, donde terceros pueden vender sus productos, pero que no tienen producto producto.
Ya es hora de que le empiecen a parar los pies. Y no se puede olvidar lo que le gusta a Amazon la precariedad laboral: la última muestra es que ha decidido retirar el plus salarial (2 euros por hora, que suponía un aumento del 20%) que había adoptado ante el aumento del comercio electrónico debido al confinamiento por el coronavirus, pese a que está sacando tajada de esta crisis con ingresos crecientes. Y para que la retirada del plus pase más inadvertida, Amazon la ha hecho coincidir con el anuncio de un nuevo centro logístico en Alcalá de Henares (Madrid). ¡Vaya cara más dura tiene Jeff Bezos!