- Es el esquema Fainé: de la Caja cuelga el grupo industrial y el banco Caixabank. Y como el asunto funciona, el 'sistema' tiene que aguantarse.
- ¿Cuándo se irá Fainé? Cuando encuentre a alguien que mantenga el tinglado por él creado.
- Objetivo imposible. Introducir a Telefónica y Repsol en Criteria cuesta demasiado.
- El negocio bancario ha muerto. Ahora, Caixabank se dedica a fondos y seguros. Sí, ¿y las enormes redes y plantillas de la banca? O se reconvierten o sobran.
- Por lo demás, Caixa es la reina de la banca doméstica o al por menor.
- Si hablamos de deseos, el que suscribe está convencido de que Fainé quisiera comerse Bankia y Goirigolzarri quisiera comerse el BBVA.
¿La banca española mejora? Sí, pero eso no quiere decir que esté bien. Ni de lejos.
¿La banca española está mejor que la extranjera? Sí, pero esto no significa que, si seguimos con la apocalíptica política económica de acudir a la fabricación de dinero como el remedio para todos nuestros males y si animamos a la construcción de megabancos como remedio último para todo tipo de insolvencia… entonces la crisis bancaria iniciada en 2007 resucitará, a ser posible multiplicada por cuatro.
Dicho esto, Isidro Fainé (en la imagen junto a Cortázar), presidente de la Fundación Bancaria La Caixa y de Caixabank, es hoy el hombre que ha conseguido mantener dos realidades que la modernidad financiera trata de liquidar a cualquier precio. A saber: las cajas de ahorros, con su obra benéfico-social (OBS), y la banca industrial. Nuestro más modernísimos y anglosajones -una reiteración, sin duda- banqueros se llevan las manos a la cabeza- ante tamaña antigualla.
La Fundación Bancaria Caixa (a partir de ahora Caixa, para abreviar) posee un 56% de Caixabank. Cada vez menos, por imperativo legal, pero… El acuerdo de Fainé ha consistido en colocar la OBS arriba del todo para que la Caixa no desapareciera. La OBS es el alma de la Caixa. 500 millones de euros de presupuesto anual, que se dice pronto. En 2015 repite presupuesto de 2014. De esa cantidad, el 67% es social. En plata, dedicado a la lucha contra la pobreza. Ni ciencia, ni medio ambiente, ni cultura ni investigación, que se reparten el resto. Sí, suena muy bien todo, pero la OBS de verdad es contra la miseria, la educación y la enfermedad. Lo otro, lo de la cultura -más bien el espectáculo-, queda muy bien pero puede esperar. Además, sobran medios para culturizarse de forma gratuita pero no sobran medios para subsistir cuando vienen mal dadas.
Sobre todo, la Caixa lucha contra la pobreza infantil (5.700 niños asistidos) y los viejos terminales. "104 hospitales y atención domiciliaria para quitarles la baba a los que mueren solos", traduce Fainé. Esa es la clave.
Sigamos con la pirámide hacia abajo. De la OBS, de la caja, cuelga Criteria Caixa Holding, el grupo industrial y Caixabank (Repsol y Telefónica de está ultima). Para alimentar esta OBS, "el alma de la Caixa", se necesitan los dividendos del grupo industrial, que en buena parte han salvado el margen de Explotación de Caixabank en 2014, y los dividendos que el 56% de Caixabank en poder de la Caixa reporta a esta. El problema es que, al obligarle a convertir la caja en un banco, ese porcentaje está llamado a decrecer. El problema es el ritmo, y entonces la OBS puede sufrir.
Y ahora viene la segunda pregunta, la pregunta de la rueda de prensa de presentación de resultados 2014: ¿Qué va a hacer Isidro Fainé cuando, a la vuelta de año y medio, deba elegir entre presidir la baca o presidir el banco? Pues no lo tiene claro y tampoco le importa. Lo cierto es que elegirá como sucesor, sea en Caixa o en Caixabank, a aquel que sepa mantener el tinglado por él montado, que puede resumirse así: me obligáis a convertirme en banco pero yo me cuelo por la parte de atrás y recuperar la caja y la banca industrial: ¡Chupa del frasco, progresía financiera!
Vamos con Caixabank. En primer lugar, seguimos en la tónica que ya llevamos repitiendo en Hispanidad con los resultados 2014: la clave está en que el negocio bancario ha dejado de ser negocio. Con estos tipos de interés y el escaso crédito que fluye hacia la pequeña propiedad no hay manera de hacer negocio. Y con los nuevos tipos de bancos nacientes (por ejemplo, los google) menos. No, los banqueros cobran ahora por gestionar patrimonios. Es decir, la gente se aleja, a la fuerza, de las IPF y de los depósitos remunerados y se van al fondo de inversión y a los seguros de ahorros a largo plazo, por ejemplo, pensiones. Ahí el banco no arriesga, no hay morosidad: el cliente puede ganar mucho o poco que el banco siempre se lleva su comisión.
El problema es cómo hacer compatible esto con unas redes bancarias dotadas de muchas oficinas y grandes plantillas.
Por lo demás, Caixa es la reina de la banca doméstica o al por menor. El 32,1% de las nóminas de los españoles se cobran en Caixa. La cuota de mercado de tarjetas es del 21,4% y la penetración en clientes del 27,6%. Y todo ello crecerá con Barclays. Tarjetas contactless, la tarjera del futuro, son líderes. Ahora ya tienen 15.000 pulseras contacless.
Dos iniciativas: Caixa negocios para pymes y profesionales. 257.000 negocios captados y una cuota de autónomos del 31,3. Y Agrobank. 386 oficinas dedicadas al sector agrario.
Caixabank. Lo dicho, los reyes de la banca doméstica.
Y más: el depósito bancario se hunde. Frente a los fondos y a los seguros de ahorro y planes de pensiones. En fondos tiene el 15,3% en cuota de por patrimonio (segunda de España) y en seguros de ahorro y planes de pensiones alcanza el 20,6% de cuota.
Sí, pero todo ello significa que el negocio bancario ha dejado de ser negocio. En otras palabras, Caixabank es el banco más importante de España, aunque no sea el banco español más importante (en tamaño le superan Santander y BBVA) pero, como todos, huye del negocio clásico y del riesgo de la banca tradicional.
Más, ante los periodistas, Isidro Fainé se negó una y otra vez a valorar el proceso independentista catalán, pero sí, al igual que Oliu un día antes, dejó claro que no iban a demandar a Bankia. Por la misma razón que Oliu: apostamos y perdimos, fue nuestra responsabilidad de compradores, no se la atribuimos al vendedor.
Y hablando de Bankia: Fainé cree en la banca presencia, Es más, su objetivo sería Bankia, con quien ya intentó fusionarse en su día. Ahora bien, asegura que debe ser Bankia quien acuda a ellos y "no creo que eso ocurra próximamente". No, tendremos que esperar a una fusión entre los dos líderes -junto al Popular- de la banca doméstica pero dejando claro quién debería tomar la iniciativa. Si hablamos de deseos, el que suscribe está convencido de que Fainé quisiera comerse Bankia y Goirigolzarri quisiera comerse el BBVA.
¿Y Telefónica y Repsol? Fainé no suelta prenda. Su ideal sería que el 5% de Telefónica y el 12% de Repsol entraran en la renacida Criteria que ahora lleva Marcelino Armenter. Ahora bien, eso significaría que la caja tendría que pagarle el importe de ambas participaciones al banco. Y eso es difícil.
En resumen, sólo un cajero convencido, muy convencido de que el insultado negocio bancario también puede ser un servicio al bien común, podría crear un entramado como éste. Por el bien de todos, que dice cuanto más mejor y, soñar es gratis, que cunda el ejemplo, la imitación de los buenos. Ni a la izquierda ni a la derecha políticas, ambas prisioneras del gigantismo y los criterios del Nuevo Orden Mundial, les va a gustar. Señal evidente de que el esquema Fainé en Caixa-Caixabank es bonísimo.
Eulogio López