En su Carta Dominical de este 19 de julio, titulada Un encargo precioso, el cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), tal y como publica Religión en Libertad, ha recordado que con su acción educativa la Iglesia "ha colaborado con las arcas del Estado y ha generado un ahorro de más de 3.500 millones de euros a la administración pública".
Los datos referidos a la Educación tienen especial relevancia en estos momentos, en los que en España el gobierno socialcomunista prepara una nueva ley educativa dirigida directamente contra la enseñanza concertada, cercenando la libertad de creación y de elección de centro: "Uno de cada cuatro alumnos va a un colegio concertado católico. Nuestra acción educativa ha colaborado con las arcas del Estado y ha generado un ahorro de más de 3.500 millones de euros a la administración pública".
La ofensiva gubernamental contra los centros de iniciativa social no se limita a la futura Lomloe (Ley Orgánica de Modificación de la LOE). El ejecutivo de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ha decidido excluir a los centros concertados del fondo de 2000 millones de euros en ayudas compensatorias por la crisis del coronavirus, algo que José María Alvira, secretario general de Escuelas Católicas, consideró propio de un "sistema dictatorial".