Una furgoneta kamikaze, con 52 inmigrantes subsaharianos, ha logrado atravesar la frontera de Ceuta embistiendo a toda velocidad contra la entrada del Tarajal y consiguiendo romper las puertas metálicas, tras lo cual muchos de los inmigrantes se dieron a la fuga corriendo.
Viajaban 34 hombres y 16 mujeres, además de dos menores de seis años y cinco meses acompañados de sus madres. Cuatro de los subsaharianos han tenido que ser trasladados al hospital.
Varias patrullas de la Guardia Civil han logrado detener al conductor del vehículo, un marroquí con residencia en Francia, el cual será acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Además, el director general de la Guardia Civil, Félix Azón, ha destacado que los 52 inmigrantes de origen subsahariano están localizados.
El Gobierno anunció recientemente que en noviembre comenzarían las obras de retirada de las concertinas en el vallado fronterizo, sustituyéndolo por otras medidas que aumenten la seguridad sin provocar daños a los inmigrantes.
El uso de automóviles 'kamikaze' para introducir personas irregularmente en Ceuta se viene repitiendo esporádicamente desde hace 2013, aunque nunca con un número tan elevado de personas.