- El chileno César Mosquera, propietario de Imprenta Publicamos, pide respeto: "Yo no puedo hacer algo que va en contra de mis creencias".
- Pero los lobbies LGTB sólo ven lo que les interesa (discriminación a gays) y llevan la persecución hasta los juzgados.
- Mosquera ha perdido el primer juicio y ha sido sancionado a pagar una multa de 700 dólares, aunque ha apelado.
- Todo empezó en agosto de 2015, cuando Mosquera se negó a imprimir las invitaciones de la unión civil de dos gays.
- Para aumentar la polémica, otra pareja gay fue a la misma imprenta y tras el 'no', presentó una segunda querella.
Nuevo caso de
cristofobia, en esta ocasión en Chile. Y es que un cristiano evangélico lleva tiempo
perseguido por los lobbies LGTB por negarse a imprimir invitaciones a un acto gay, aludiendo a sus creencias, según informa
Religión en Libertad.
Hablamos del chileno
César Mosquera (
en la imagen), propietario de
Imprenta Publicamos.
En la web de esta empresa puede leerse un "aviso importante" publicado el pasado 20 de abril: "Por el momento no estamos recibiendo ningún tipo de solicitud de cotización ni pedidos de trabajo, hasta nuevo aviso".
Mosquera sólo
pide respeto y señala que no han discriminado a nadie. En el periódico digital
El Demócrata, señaló "
yo no puedo hacer algo que va en contra de mis creencias, por lo que hay una razón justificada por la cual yo me negué a imprimir esas invitaciones". Además, pide que se respete la
libertad de culto y la
objeción de conciencia, recogidas en la Constitución chilena.
Pero los lobbies
LGTB sólo ven lo que les interesa (discriminación a gays) y llevan la persecución hasta los juzgados. Ya saben que en estos temas no todo el mundo tiene los mismos derechos ni la misma libertad de expresión: recuerden el caso de la española
Alicia Rubio,
recientemente destituida como jefa de estudios, por no callarse las
mentiras de la ideología de género.
El pasado mes de marzo, Mosquera perdió el primer juicio, en el que fue sancionado a pagar una
multa de 700 dólares. Pero el pasado 22 de abril, apeló dicho fallo, como se puede leer en el
Twitter de la imprenta. Ahora habrá que esperar a ver que sucede…
Todo empezó en agosto de 2015, cuando Mosquera se negó a imprimir las invitaciones de la
unión civil de Pablo Zapata y Luis Carreño. Y es que en Chile no existe el matrimonio homosexual, pero las uniones civiles de parejas del mismo sexo son legales.
El lobby LGTB
'Fundación Iguales' y el Servicio Nacional del Consumidor (
Sernac) chileno demandaron a Mosquera. Claro que para aumentar la polémica, otra pareja gay (Alonso Gaete y Roberto Ibáñez) fue a Imprenta Publicamos y tras obtener un nuevo 'no', otro lobby LGTB (Movimiento de Integración y Liberación Homosexual,
Movilh) presentó otra querella contra Mosquera por vulnerar los derechos de no discriminación.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com