• El periodista, uno de los fundadores del partido naranja, dice: "Cuando 8 millones de personas votan a un presidente del Gobierno hemos de reconocer humildemente que los ciudadanos españoles no comparten nuestra opinión y ponerse a disposición de la razón y del sentido común".
  • Otro de los fundadores, Francesc de Carreras, sostenía que "vetar a Rajoy como posible presidente no es serio ni un buen precedente democrático".
Consecuencias también para Ciudadanos tras los resultados del 26-J, donde el partido de Albert Rivera se dejó ocho escaños y casi 400.000 votos. Y es que han surgido discrepancias en el entorno del partido naranja a propósito de la estrategia que debe seguirse sobre si ayudar o no a Mariano Rajoy a formar Gobierno. Desde la línea oficial, y sobre el veto a Mariano Rajoy que defendía Albert Rivera, el secretario general del partido, Miguel Gutiérrez, dijo que "el quién no es importante", si bien insistió en que Rajoy no debería ser quien abanderara este "nuevo tiempo político". Sin embargo, destacados intelectuales fundadores de Ciudadanos se oponen al veto a Mariano Rajoy. Por ejemplo, Arcadi Espada instaba ayer a Albert Rivera a facilitar la investidura de Rajoy y dejarse de "bobadas". "Cuando ocho millones de personas votan a un presidente del Gobierno, aun sabiendo que a Rivera le iba a sentar muy mal este voto, hemos de reconocer humildemente que los ciudadanos españoles no comparten nuestra opinión y ponerse a disposición de la razón y del sentido común", recoge El Economista. Una llamada de atención que se unía a la realizada el martes por otro de los padres políticos de Rivera, Francesc de Carreras quien sostenía que "vetar a Rajoy como posible presidente no es serio ni un buen precedente democrático". Andrés Velázquez andres@hispanidad.com