- Marcos de Quinto, vicepresidente de la multinacional de Atlanta, se hubiera quedado sin argumentos para eludir la polémica sobre el mega-ERE con beneficios.
- Mientras, Sol Daurella, presidenta de la 'megaembotelladora' europea, se lleva oficinas de Londres a Bulgaria.
- Por ahora, sólo las de contabilidad, pero podrían sumarse otros departamentos. Eso sí, la sede central seguirá en Londres.
- Y es que Bulgaria es el país que tiene el impuesto de sociedades más bajo de la UE (10%).
- Más mentira de Coca-Cola: sólo publicita bebidas sin azúcar pero continúa vendiendo todas.
Parece que
Coca-Cola, por fin, acabó con el
paripé que tenía en
España. Y es que la
'megaembotelladora' europea (CCEP) y la
marca compartirán la nueva sede inaugurada en nuestro país, de 12.000 metros cuadrados y la más moderna. Eso sí, tendrán espacios diferenciados… algo que parece más bien anecdótico.
El director general de Coca-Cola Iberia,
Jorge Garduño, que dejará su puesto en manos de
Manuel Arroyo en marzo y
pasará al mercado internacional, señaló que "para que un viaje sea bueno de verdad es imprescindible viajar acompañado". "En estos dos últimos años, hemos vivido y hemos estado cerca en numerosos logros, pero aún queda mucho camino por recorrer", ha añadido.
Con el hecho de compartir las nuevas oficinas de la calle Ribera del Loira en Madrid,
Marcos de Quinto, actual vicepresidente y responsable mundial de marketing de la multinacional de Atlanta, ya no tiene argumento para defender el
ERE con beneficios de Coca-Cola Iberian Partners (hoy integrada en la 'megaembotelladora' europea). Y es que en el punto álgido del
conflicto laboral, cuando era responsable de la multinacional en España,
tiraba balones fuera asegurando que era un tema del embotellador ibérico y la 'marca de la felicidad' no tenía nada que ver. ¡Qué cinismo!
Mientras,
Sol Daurella, presidenta de la 'megaembotelladora' europea, se lleva oficinas de Londres a
Bulgaria, como informa
Economía Digital. Por ahora, sólo ha comenzado a trasladar las de contabilidad, pero podrían sumarse otros departamentos… para
reducir costes. Eso sí, la sede central seguirá en Londres. Y es que Bulgaria es el país con el
impuesto de sociedades más bajo de la UE (tipo del 10%) y ofrece ventajas fiscales a las empresas que se implanten allí. Además, aún no ha adoptado el euro y su moneda es la
leva (una equivale a 0,51 euros).
Claro que no hay que olvidar que la obsesión de Daurella por reducir costes va mucho más allá: por ejemplo, baraja
producir bebidas en África, pues controla el 60% de
Equatorial, la embotelladora en 12 países de dicho continente). Por tanto,
la historia de Fuenlabrada puede repetirse en otras plantas, tristemente. Además, hay preocupación por el auge de los
impuestos a los refrescos (
en España, ya sólo anuncia bebidas sin azúcar, aunque venda todas).
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com