España ha sido un ejemplo en el despliegue de 4G y, sobre todo, en el de fibra óptica. Pero esta situación de privilegio puede tener sus días contados con el 5G, la tecnología que cambiará la manera de comunicarnos y, sobre todo, que posibilitará múltiples aplicaciones, la mayoría aún desconocidas. Ahora bien, el 5G requiere inversiones muy elevadas que únicamente se pueden afrontar en un entorno real de competencia.
Antonio Coimbra es de los que opina que ese entorno favorable no se da actualmente en nuestro país. El mercado español “no pinta nada bien”, aseguró el domingo en Barcelona, durante un encuentro con la prensa. Y el CEO de Vodafone España concretó su punto de vista: España es el único país con un cuarto operador convergente low cost que utiliza la red de terceros, explicó en referencia a MásMóvil.
Coimbra negó cualquier interés por comprar Euskaltel. “No hay nada, cero”, zanjó el directivo.
Otra muestra de la falta de competencia real en nuestro país, según Coimbra: el modelo de comercialización de los derechos del fútbol, que beneficia a Telefónica y penaliza de manera especial a Vodafone. Por cierto, un modelo que podría cambiar en abril de 2020, cuando la CNMC revise las condiciones pactadas en la compra de DTS por parte de Telefónica. No se emocionen: hay pocas esperanzas de que eso vaya a suceder.
Una de las consecuencias de la situación actual del mercado es el ERE acordado el viernes entre la dirección y los sindicatos de Vodafone, y que supondrá la salida voluntaria de 1.000 empleados. “Ha sido un mes muy difícil para nosotros”, comentó Coimbra, que justificó la medida asegurando que la compañía “estaba sobredimensionada para afrontar la competencia”.
Por cierto, Coimbra negó cualquier interés por comprar Euskaltel. “No hay nada, cero”, zanjó el directivo.