- Las conversaciones de paz sobre Siria empezarán el 29 de enero y durarán seis meses.
- Según el enviado especial de Naciones Unidas para el conflicto en Siria, Staffan de Mistura, todavía se está discutiendo la lista de invitados.
- Por lo que es el momento ideal para invitar a los cristianos, los más masacrados en esa cruenta guerra.
- Numerosos testimonios así lo acreditan: la hermana religiosa María Guadalupe Rodrigo, que lleva 4 años en Siria, lamenta que "los cristianos están sufriendo un genocidio" en ese país, pero "nadie habla de eso".
Las conversaciones de
paz sobre
Siria empezarán el 29 de enero y durarán seis meses, ha informado en Ginebra el enviado especial de Naciones Unidas para el conflicto en Siria,
Staffan de Mistura, según informan
agencias.
Según De Mistura, el objetivo de las conversaciones será un alto el fuego amplio, frenar al grupo terrorista
Estado Islámico e incrementar la ayuda. Asimismo, ha dicho que prevé que haya «conversaciones de proximidad» entre las dos partes durante al menos seis meses. La primera fase de las conversaciones, que abordarán cuestiones como gobernanza, revisión de la Constitución y futuras elecciones, durará dos o tres semanas, ha añadido en rueda de prensa.
De Mistura ha indicado que todavía se está discutiendo la lista de invitados, informa
EP.
Por eso, es el momento ideal para que De Mistura invite a representantes de los cristianos, que son los que más persecución y violencia han sufrido, sobre todo por parte del Estado islámico.
Y no lo decimos nosotros, sino fuentes bien informadas: la hermana religiosa
María Guadalupe Rodrigo lamenta que "los cristianos están sufriendo un genocidio en Siria", donde lleva cuatro años prestando ayuda, aunque critica que "nadie habla de eso" y que son ya "cuatro años de matanzas de cristianos".
En una entrevista concedida a la
Agencia Efe, Guadalupe relata la experiencia que vive en este tiempo en la ciudad de Alepo (Siria) ayudando a refugiados de origen cristiano y durante 18 años en Oriente Medio, y afirma que en primer lugar su labor se centra en ayudar a los cristianos porque "son los primeros que lo están pasando mal dejando sus casas", debido a la "persecución abierta al cristianismo que hay en Siria".
Guadalupe destaca que la Iglesia "no niega su ayuda al resto" de sirios, pero que "la caridad empieza por casa" ya que los cristianos son los primeros perseguidos.
"Todos los días están decapitando gente, enterrando niños vivos por ser cristianos" deplora la religiosa, que se queja de la cobertura que hacen los medios de comunicación occidentales del conflicto, porque "no se dice la verdad de lo que está pasando y eso es un gran dolor para el pueblo sirio".
Para la hermana Guadalupe, "la solución no es abrir fronteras, la solución es parar la guerra" y para ello hay que "dejar de vender armas y de apoyar a los grupos rebeldes y terroristas, como dice el Papa Francisco".
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com