Consejo de Ministros del martes 1 de septiembre. Este paripé ya no lo salva ni la ínclita ministra portavoz, Marisú Montero, quien por cierto ha decidido ya, de forma definitiva, que no va a contestar a pregunta alguna pero que su respuesta nunca durará menos de cinco minutos.
Mientras, Podemos amenaza con abandonar el Gobierno si no dirigen ellos los Presupuestos. ¿A que no?
El mensaje de Sánchez, el narciso de Moncloa, que funciona por consignas, a la oposición, puede resumirse así:
Obligado estarás a pactar lo que yo te quiera dictar… si demócrata te quieres llamar. Insiste Montero en hacer unos Presupuestos ‘de país’, en superar partidismo para pensar en el bien de todos los españoles, pero ojo, esos “presupuestos de país”, pactados con todos y con todas deben ser progresistas, feministas, ecologistas y digitales. Y el que quiera aprender que vaya a Salamanca. Y a eso le llaman en el PSOE la despolitización de la pandemia.
Lo peor: el Consejo de Ministros se ha convertido en el mitin semanal de socialistas y podemitas
Para que no falte de nada, Podemos amenaza con abandonar el Gobierno si no dirigen ellos los Presupuestos. ¿A que no Pablete? Que tú no te levantas de tu sillón de vicepresidente ni con agua caliente.
Con todo, lo peor es que el Consejo de Ministros se ha convertido en el mitin semanal de socialistas y podemitas. No se si este martes han aprobado algo, pero la verdad es que eso poco importa. Montero está ahí para vender consignas, nada más.
No a los partidismos… pero la culpa de los rebrotes la tiene la popular Isabel Díaz Ayuso
El Narciso de Moncloa repite que no es tiempo de partidismos… pero la culpa de los rebrotes la tiene la popular Isabel Díaz Ayuso, que le tiene muy preocupado al Gobierno, tan preocupado que sigue soñando con una moción de censura aprovechando la más que previsible traición de Ciudadanos.
En cualquier caso, Sánchez, el hombre que exige consenso a partir de sus propias conclusiones, el hombre del diálogo, sigue sin contestar a la pregunta clave de todo diálogo o negociación: ¿usted en qué está dispuesto a ceder?