La mejor declaración pública del sábado 21 corrió a cargo de María José Rallo, secretaria general de Transportes y Movilidad. Su idea ha corrido entre la Administración socialista y, lo que es peor, entre parte de la ciudadanía. Este es el enunciado de la señora Rallo: el confinamiento en el hogar ha sido un éxito y esto se demuestra en que -por ejemplo- el movimiento de viajeros ha sido el 2% de una día normal.
¿Me siguen? Como viaja mucha menos gente, esto significa que el confinamiento está dando resultados.
El Gobierno considera que el éxito del confinamiento consiste en reducir los viajes o en aumentar el tráfico por Internet: ¡A la fuerza ahorcan!
A ver, señora Rallo: el confinamiento forzoso de la gente en su casa no tenía por objetivo que la gente viajara menos sino que la gente no se contagie con el coronavirus.
Pues da lo mismo: apenas cuatro horas después, el presidente del Gobierno insiste: los españoles están cumpliendo con las medias de aislamiento programadas. Claro, a la fuerza ahorcan. Si sales a la calle te detienen.
Eso sí, sin despeinarse, don Pedro asegura que a este pueblo le preocupan muchos sus derechos y libertades. No me extraña: los está perdiendo.
El presidente del Gobierno asegura que nos está haciendo un favor: cuando esto acabe, “descubriremos de qué madera estamos hechos”
En cualquier caso, mientras se disparan los fallecidos y encima se anuncian días aún más duros, Sánchez asegura que el confinamiento es eficaz contra el contagio. Pues por el momento…
En resumen, el gobierno de Pedro Sánchez se ha convertido en el rey de la tautología: si obligo a alguien a hacer algo y lo hace… es que he acertado. La verdad es que si la gente te secunda bajo la amenaza del palo y la sanción no resulta muy meritorio. Si vences, no hace falta convencer.
El segundo papel de Sánchez es el de bombero pirómano: Sánchez ataca a quienes crean histeria con los bulos. Pero hombre, si la histeria la ha creado él, convirtiendo cada hogar español en una cárcel.
A la misma hora en que hablaba el presidente, una sonora cacerolada, en toda España, clamaba contra el “caos del Gobierno”
Y así, el gobierno de España considera que el éxito del confinamiento consiste en reducir los viajes o aumentar el tráfico por Internet. ¡Qué remedio! Si te obligan a trabajar en casa aumenta el tráfico de Internet y si te obligan a no viajar, no viajas. Insisto: a la fuerza ahorcan.
Y la guinda de la tarta: el presidente del Gobierno considera que nos está haciendo un favor: cuando esto acabe, “descubriremos de qué madera estamos hecho”. Gracias presidente, por ayudarnos a ser mejores.
Y encima, asegura Sánchez que de esta crisis tenemos que salir con un Estado de Bienestar reforzado. O sea, seguimos camino de la ruina.
Casualmente, a la misma hora en que hablaba el presidente, una sonora cacerolada, en toda España, clamaba contra el ‘caos del Gobierno’. Menos golpear cacerolas y más escuchar al señor presidente.