- UNO pide así a la Comisión que no sólo indague en las subvenciones concedidas entre 2004 y 2010.
- Señala que Correos tiene ventajas en las licitaciones con las AAPP, ventajas aduaneras...
- Es más, propone que se amplíe la investigación a todas las filiales de Correos y no sólo afecte a Correos Express.
- También solicita que tenga en cuenta las aportaciones estatales recibidas entre 1998 y 2004 (794 millones), aunque hayan prescrito sus responsabilidades.
En los últimos meses, el panorama se le ha complicado bastante a
Correos, pues en abril,
Bruselas impugnó las subvenciones que recibe el servicio postal y a primeros de mayo, se supo que
la CNMC le investiga por competencia desleal en paquetería urgente. Pero ahora parece que la empresa pública está entre la espada y la pared, pues es la patronal de paquetería y transporte urgente,
UNO, la que presiona a Bruselas para que investigue también sus
privilegios.
De esta manera, la patronal pide a la Comisión Europea que no sólo indague en las
subvenciones concedidas entre 2004 y 2010, que ascendieron a 1.239 millones de euros. Unas ayudas que han permitido a Correos sugfragar: el Servicio Postal Universal (
SPU), exenciones sobre impuestos como: Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), ampliaciones de capital en la filial
Correos Express y compensaciones por la distribución de material electoral.
UNO señala que entre esos privilegios sobre los que Bruselas debe poner la lupa están las ventajas en las licitaciones con las AAPP, el derecho a la fehaciencia (autenticiadad) de las comunicaciones postales o ventajas aduaneras específicas del Servicio Postal Universal (
SPU) que aplica a todos sus servicios, sobre todo, a los de
paquetería. Este último privilegio es uno de los que le permite tirar los precios y hacer
competencia desleal a las empresas del sector, al igual que el uso de las subvenciones estatales.
Pero además, la patronal denuncia que el
IBI y el IAE no son los únicos impuestos que Correos no paga. En su opinión, la investigación europea también debe observar si las exenciones son una ayuda estatal encubierta y se amplia a otros impuestos, como:
IVA, tasas de ocupación de dominio público, vados, recogida de residuos, etc. Y es que, a pesar de que las exenciones del IVA a los servicios postales se suprimieron en 2006,
Correos se hace cargo del coste del impuesto en ofertas de servicios que hace a sus clientes empresariales.
Y por su esto fuera poco, UNO también pide que se tengan en cuenta
otras ayudas financieras encubiertas a Correos Express, como un crédito de 45 millones a intereses fuera del mercado, un 0,33%. Así como las ayudas indirectas que recibe esta filial por aprovechar la publicidad institucional y la marca Correos, sus servicios informáticos o su red de oficinas, entre otras.
UNO va mucho más allá y propone que se amplíe la investigación a todas las
filiales de Correos y no sólo afecte a Correos Express. Su idea se basa en que se trata de un grupo empresarial mercantil, con dirección centralizada de todas sus filiales, por lo que la investigación debe incluir todas las empresas del grupo.
La patronal de paquetería y transporte urgente también solicita que tenga en cuenta las aportaciones estatales recibidas entre 1998 y 2004, que ascendieron a 794 millones de euros sobre los que no hay fiscalización alguna. Sin embargo, hay un pequeño-gran problema y es que ya han prescrito sus posibles responsabilidades.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com