La variación trimestral del Índice de Coste Laboral Armonizado (ICLA) –que mide el coste laboral por hora trabajada manteniendo constante la estructura por ramas de actividad– entre el segundo y el primer trimestre de 2020, eliminando los efectos estacionales y de calendario, fue del 5,4%, ha publicado el INE.
También en datos trimestrales, por componentes, en datos desestacionalizados y corregidos de calendario, el coste salarial aumenta un 3,2% y los otros costes suben un 11,7%. Sin tener en cuenta el ajuste estacional y de calendario, la tasa trimestral del ICLA fue del 12,7% debido, fundamentalmente, al mayor peso de los pagos extraordinarios y atrasos en el segundo trimestre de 2020 respecto al trimestre anterior.
En tasa anual, el coste por hora trabajada aumentó un 8,2% en el segundo trimestre de 2020 respecto al mismo periodo del año anterior. Este crecimiento se debe a la situación derivada de la pandemia provocada por el COVID-19 y la declaración del estado de alarma que ha provocado una disminución de las horas trabajadas superior a la observada en los costes. Si se eliminan los efectos estacionales y de calendario, la variación anual del coste por hora es del 8,3%. Por componentes, el coste salarial registra una variación anual del 6,2% en datos corregidos y los otros costes aumentan un 14,4%, añade el INE.