- La candidata andaluza le echa encara los bandazos que da y los fracasos electorales que ha acumulado el PSOE con él.
- El debate a tres pone en solfa la unidad del partido y muestra las muchas posibilidades de que se rompa... por Sánchez.
- El candidato madrileño también odia a Susana: no le perdona que no le consultara el pacto en Andalucía con Ciudadanos.
- Y carga contra todo por lo que arrastra desde el 1 de octubre, su salida, especialmente contra la gestora.
- Patxi López sale reforzado, hace valer su candidatura y rechaza cualquier coqueteo con el ex secretario general.
- Entre las medidas, pocas sorpresas: derogar reforma laboral, ingreso mínimo vital, igualdad, más papel de los militantes.
Este lunes ha tenido lugar el
debate entre los tres candidatos a las
primarias del
PSOE del próximo 21 de mayo. Y como se esperaba, no ha habido nada nuevo bajo el sol de Ferraz, sino pocos proyectos y muchos
reproches… aunque con
guante blanco.
Susana Díaz,
Pedro Sánchez y
Patxi López (
ambos en la imagen) han hablando de unión, pero una cosa son las palabras y otra los hechos que tengan lugar. Y es que parece que los tres son incompatibles, sobre todo, la andaluza y el madrileño.
El candidato vasco,
Patxi López, ha salido reforzado y ha hecho valer su candidatura. Ha sido el que más
propuestas ha realizado y ha rechazado el
'coqueteo' de Sánchez para sumarle a su proyecto: "Tus propuestas están en mi candidatura" le ha dicho el ex secretario general socialista.
López le ha respondido que eso sería porque le faltaran ideas, subrayando que son las ideas que defiende siempre, "yo no las cambio". Ha pedido
coherencia y ha apostado por resolver los problemas de división y
definición", pues si no desaparecerán como les está pasando a otros en Europa. "Ningún militante sin voz y ningún dirigente sin control", ha añadido.
Susana Díaz ha criticado los "
bandazos" y los malos resultados electorales de Sánchez (los peores para el PSOE). "Tu problema no soy yo… Felipe González, Zapatero y la gente ya no se fían de ti.
Tu problema eres tú", le ha reprochado. Al mismo tiempo, que ha anunciado que si con ella no mejoran los resultados electorales socialistas, se iría "sin hacer ruido", como lo han hecho otros muchos secretarios generales.
Para Díaz, el PSOE es "
un partido que está malito" y por eso debe apostar "primero por
España, después por el PSOE y después por el secretario general". Eso sí, ha tenido un ligero rifirrafe con Sánchez por el tema territorial: Sánchez apuesta por la
nación de naciones y le ha adjudicado a Díaz algunas relaciones con la plurinacional, pero esta le ha dicho "¡no mientas, cariño" y que su postura es la Declaración de Granada y no el nacionalismo, sino el internacionalismo. "El PSOE es más importante que todos los que estemos aquí", ha añadido.
El candidato madrileño guarda rencor a Susana por no consultarle su pacto con
Cs en la Junta de Andalucía, también ha criticado a la
gestora (por sus poderes ejecutivos) y no perdona lo que pasó el 1 de octubre (cuando le obligaron a presentar su dimisión). Eso sí, ha defendido un
partido abierto, donde no es necesario tener carnet, como se vio cuando eligió a Irene Lozano y Margarita Robles.
Entre las medidas, pocas sorpresas. La mayoría habló de
derogar la reforma laboral del PP y de igualdad (de oportunidades, de género, etc.). Sánchez volvió a proponer el ingreso mínimo vital y
subir el SMI, así como revalorizar las pensiones conforme al IPC; López también apostó por una reforma fiscal y
Díaz quiere que la inclusión social sea un nuevo pilar del Estado del bienestar.
Cristina Martín
cristina@hispanidad.com