Frente al actual debate que se ha generado en Argentina en torno a la propuesta política de liberalizar el aborto, el Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, aseguró que la posición de la Iglesia Católica es defender “la dignidad verdadera de la mujer”, recoge Aciprensa.
“Se piensa que si uno protesta por este intento de legalizar el aborto está en contra de las mujeres, y la realidad es todo lo contrario”, reflexionó el Prelado en el programa Claves para un Mundo Mejor, emitido el 17 de marzo por el Canal 9.
Mons. Aguer explicó que para la Iglesia Católica “la persona humana más grande, más digna, más excelente es una mujer, la Virgen María, porque Jesús es una persona divina que se hizo hombre, tiene una naturaleza humana pero no es una persona humana”.
En ese sentido, la dignidad y el cuidado de la mujer “es algo que a la Iglesia le importa muchísimo”.
El Arzobispo de La Plata aseguró además que esto no tiene que ver solo con una cuestión teológica, sino también “antropológica sobre qué es el ser humano y esa bipolaridad de varón y mujer”, algo que explica muy bien San Juan Pablo II en su encíclica Mulieris dignitatem.
Durante su programa, Mons. Aguer cuestionó “¿quiénes son las personas o las mujeres especialmente, que reclaman libertad de abortar?”.
“Vemos que no son mujeres pobres y, con perdón y sin querer ofender a nadie, pertenecen a la burguesía; no son pobres”, señaló.
“La cuestión es ayudarlas, estar a favor de la vida, de la vida de la madre y la del hijo"
“Las chicas de barrio, de nuestra periferia, a las que conozco muy bien, cuando tienen un hijito advierten que han recibido la riqueza más grande de la vida sea cual fuere el modo como ha sido concebida”, dijo el Arzobispo.
Mons. Aguer indicó que la Iglesia busca ayudar a las mujeres con embarazos difíciles, y sobre todo las más humildes “que, a veces, acuden al aborto porque no conocen otro recurso”.
“La cuestión es ayudarlas, estar a favor de la vida, de la vida de la madre y la del hijo. Digo esto porque, a veces, se presenta como un tema de salud de la madre y resulta que por la salud de la madre se propone liquidar al hijo”, insistió el Arzobispo.
“Todos estos temas -concluyó Mons. Aguer- los propongo para que ustedes los piensen y los repliquen”.
“Es preciso que los cristianos desempeñen su papel. La defensa de la vida de los niños por nacer es una cuestión de sentido común y de esperanza en el futuro de la nación”, concluyó Mons. Aguer.