El Consejo de Administración de DIA ha advertido lo que ya avanzó Hispanidad hace unas semanas, que el plan del accionista de referencia, el inversor ruso Mikhail Fridman (29%), puede llevar a la ruina del grupo. En concreto, a su disolución o a un concurso de acreedores.
El Consejo, liderado por Borja de la Cierva, subraya que la propuesta de LetterOne no solventa problemas fundamentales, pero la suya sí
El órgano rector que lidera Borja de la Cierva lo ha hecho con un hecho relevante remitido a la CNMV ¡en domingo! (ver documento adjunto). En el mismo aseguran que la propuesta de L1 Retail, división de comercio minorista de LetterOne, está condicionada a la consecución del control antes de realizar ninguna inyección de capital y que no consigue solventar problemas fundamentales, como: “solución de la situación actual de patrimonio neto negativo”, los vencimientos de deuda del 31 de mayo y los de los bonos de julio en caso de que la OPA no se liquide satisfactoriamente antes o una solución alternativa a la estructura de capital si dicha operación no resulta exitosa. Eso sí, el Consejo afirma que “la propuesta de la compañía ofrece una solución completa a todos los problemas inmediatos” del Grupo.
La banca sigue teniendo la última palabra. El futuro depende de la quita que admita
Como saben, el magnate ruso Fridman lleva tiempo jugando sus cartas para presionar a la banca acreedora, tras el cambio de control y el previsible éxito de su OPA. Pero aún no hay desenlace ni nada escrito y la banca sigue teniendo la última palabra. El futuro de DIA depende de la quita que esta esté dispuesta a admitir.