El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, realiza una visita oficial de dos días a Cuba, la primera de un presidente de España después de la que hizo Felipe González hace 32 años.
No se reunirá, por cierto, con disidentes cubanos, cosa que a uno de ellos -el viaje en general-, Guillermo Fariñas le parece “una bofetada a los que quieren otra Cuba”, tal y como ha dicho en La Razón.
Cuando Sánchez dice que su misión no es política sino económica se está retratando como parte de una izquierda carnívora y radical
"Este viaje demuestra la complicidad del presidente del Gobierno español con el régimen. Yo le he enviado una carta a Pedro Sánchez pidiéndole que, como mínimo, se reúna con las Damas de Blanco, porque son las que están siendo más reprimidas. El presidente Sánchez es también un culpable de lo que le está ocurriendo al pueblo cubano. Está tratando de reflotar la economía y de legitimar a nivel internacional a este Gobierno neocastrista en un contexto tan difícil para el régimen, en el que los aliados cada vez son menos y los adversarios cada vez más”, ha apuntado el opositor cubano.
Y añade: "Cuando Sánchez dice que su misión no es política sino económica, se está retratando como parte de una izquierda carnívora y radical. Ese planteamiento es una bofetada que Sánchez le da a los cubanos que están luchando por un país mejor y democrático. Pero la historia siempre pasa la cuenta a los que van en contra de la democracia y la libertad".