Duro Felguera sigue empantanada a pesar de alguna noticia positiva reciente en relación a un laudo que mantiene con Samsung). ¿La razón? Por ahora, no ha empezado 2019 con nuevos proyectos relevantes, que en un futuro aumentarían la generación de caja, y aún no ha finalizado los proyectos de Argelia y Bélgica.
En concreto, la ingeniería asturiana se adjudicó la construcción de una planta de ciclo combinado en la localidad argelina de Djelfa para la compañía Société de Production de l’Electricité, filial del grupo Sonelgaz (la empresa eléctrica y gasera estatal), por 544 millones de euros. Y en Bélgica, trabaja en la ampliación de una terminal de gas natural licuado (GNL) en la localidad de Zeebrugge para la compañía belga Fluxys LNG, por 150 millones. Si se concluyen, sería perfecto, porque evitarían que Duro Felguera solicitara una nueva inyección de capital.
Un cambio algo curioso: Gonzalo Fernández-Ordóñez sustituye a Carlos Cuevas de Miguel como director económico-financiero
En cualquier caso, por ahora, no tiene problemas de caja porque de los 125,7 millones que se inyectaron en la última ampliación de capital (realizada a finales de julio), a la ingeniería le queda una buena parte todavía. Y eso sí, aunque es una noticia positiva que el laudo parcial con Samsung por el complejo minero australiano Roy Hill, que supone cerca de 200 millones de euros, Duro Felguera estima que el impacto positivo en su patrimonio sería de entre 25 y 55 millones, porque tiene que pagar a los proveedores.
La reacción en bolsa no se ha hecho esperar. El pasado miércoles, cuando solo se hablaba del laudo parcial y de los cerca de 200 millones que suponía, la acción de la ingeniería asturiana llegó a dispararse hasta un 20% para celebrarlo, aunque rebajó, en parte, la euforia cerrando la sesión con un alza del 8,84%. Sin embargo, este jueves, tras conocerse el impacto que tendría en el patrimonio y el cambio de director económico-financiero, la cotización presenta un rumbo a la baja, con un descenso del 3% a media sesión y ha cerrado la jornada con una caída del 5%.
La banca acreedora mantiene su postura: no entrar en el capital de la ingeniería asturiana
Gonzalo Fernández-Ordóñez Cervera (quien hasta julio era consejero director financiero para Iberia de la siderúrgica alemana Thyssenkrupp) ha sustituido al frente de las finanzas de la compañía a Carlos Cuevas de Miguel, un movimiento que se puede enmarcar en la renovación del equipo directivo llevada a cabo a principios de diciembre. Aunque La Voz de Asturias destaca que es el segundo relevo en dicho departamento en dos años y El Español subraya que Cuevas fue quien filtró información a la Fiscalía (provocando el registro de la sede por parte de la Policía) dentro de la investigación por presuntos sobornos a miembros del gobierno chavista a cambio de contratos en Venezuela.
Un panorama el de la ingeniería asturiana donde no hay alarmas, por ahora, pero tampoco motivos para lanzar las campanas al vuelo. Mientras, la banca acreedora, tras el acuerdo de refinanciación (en el que aceptaron una quita en la deuda), mantiene su postura de no entrar en el capital de Duro Felguera. No quieren otra Pescanova.